12 de septiembre de 1922. El hipódromo de San Sebastián ofreció ayer impresionante aspecto, siendo imposible mayor concurrencia. Acudió a las carreras toda la familia real.

Para el gran premio hubo enormes colas para las apuestas.

Ganó el premio de 400.000 pesetas y la copa del Rey el caballo Ruban, propiedad del monarca y montado por el jockey Luciano Lyne. Como este caballo no era favorito, los primeros premios repartieron 276 pesetas por duro.

El triunfo del caballo propiedad del Rey fue objeto de las conversaciones, teniendo en cuenta que tomaron parte las mejores cuadras de Inglaterra y Francia.

l Fin de temporada en el Balneario Victoria.

Esta noche se da por terminado el espectáculo de varietés en este establecimiento, que ha estado abierto al público desde el pasado 1 de julio, con todos los servicios inherentes a la comodidad de los bañistas y veraneantes.

Durante la temporada han actuado doce guapísimas bailarinas, seis cupletistas y siete cancionistas, entre otros espectáculos.

También se da por terminado el servicio de bares y restaurant, quedando sólo en el del piso bajo lo indispensable para el uso de los bañistas, puesto que el servicio de playa no se interrumpe, dada la concurrencia que aún asiste a la misma durante las mañanas y tardes.