Desde enero de 2007 (hace tres años casi y medio) los jóvenes gaditanos sólo tienen la Punta de San Felipe como lugar de reunión, que es el que se habilitó para el llamado botellódromo. Y hace ya más de un año que las condiciones de esta zona de la ciudad cambiaron radicalmente, al adjudicar de nuevo las concesiones de los locales de ocio y apostar los empresarios por dar un mayor atractivo al paseo Pascual Pery Junquera. Pero lamentablemente las cosas han cambiado bien poco y tanto el botellódromo como la Punta siguen sin explotar su condición de zona de referencia para el ocio en la ciudad.

El espacio habilitado por el Ayuntamiento para las concentraciones juveniles (en el paseo superior de la Punta) sigue presentando una imagen poco o nada apropiada para el ocio de los jóvenes gaditanos. Y mucho menos para la visita de jóvenes de otras localidades. Curiosamente, este periódico publicaba en marzo de 2008 un análisis del estado de dejadez del botellódromo. Y más de dos años después la situación sigue siendo la misma: suciedad en el suelo, ausencia de papeleras, numerosas pintadas y graffitis, muchos de los cristales que protegen la zona del viento rotos, y ocho de ellos ausentes, restos de botellas rotas en el suelo, barandillas rotas y oxidadas, losas y bancos rotos,... Incluso el pequeño mirador habilitado en esta zona presenta una deteriorada imagen de los barrotes de hierro.

A esta imagen se une que el escenario para actuaciones musicales y las dos barras de consumiciones anunciadas desde el año 2007 por el Ayuntamiento siguen sin ser una realidad. Tampoco lo son los servicios que se construyeron por aquellas fechas a la llegada a la Punta y que a día de hoy -según aseguran los hosteleros y reafirman la instalación de unos urinarios portátiles- siguen sin estar en uso.

El resto del paseo Pascual Pery Junquera -desde El Malecón hasta la estatua de Gades- es una continuación de esa sensación de abandono: parterres sin vegetación, suciedad, pintadas...

Y la zona de los locales de hostelería -actualmente funcionan diez de los trece- es la que presenta un mejor aspecto. El suelo está limpio, apenas hay pintadas en paredes y columnas de ese paseo y las portadas de los nuevos negocios cuidan más la imagen (uno de ellos tiene incluso un escaparate en una de sus puertas). Además, hace meses que el acerado se amplió tras eliminar el aparcamiento de esta zona.

Sin embargo, los hosteleros siguen sin estar contentos con la actuación de las administraciones en la Punta, y reclaman un mayor apoyo a la inversión que están realizando. "La zona estaba más que marginal, y deben tener en cuenta la gran inversión que estamos haciendo en plena época de crisis", afirma el colectivo (que incluso se ha asociado para unir fuerzas de cara a la mejora de la Punta).

Estos empresarios aseguran que son ellos los que han costeado la ampliación del acerado, y reclaman al Ayuntamiento su compromiso de instalar allí farolas y, posteriormente, palmeras. Además, recuerdan la promesa del escenario para conciertos y de las barras de la zona superior, aún sin habilitar por parte del Ayuntamiento.

Y para seguir mejorando la Punta y convertirla definitivamente en el lugar de ocio de la ciudad, estos hosteleros tienen una serie de ideas, como facilitar el acceso de vehículos o vigilar el botellón de la zona superior. "El futuro de Cádiz pasa por el turismo y la hostelería. Y para eso hay que apostar por el ocio de noche, que se ha devaluado provocando que la gente cada vez se vaya más a Jerez o a El Puerto. Pensamos que éste es un lugar idóneo para el ocio", afirma la asociación de hosteleros de la Punta de San Felipe Neri, que insiste en su reclamación de un mayor apoyo por parte de las administraciones (fundamentalmente Ayuntamiento y Autoridad Portuaria).