Javier Manterola reconoció ayer ante el público gaditano que él no quiere hacer el tramo móvil del segundo puente. Y lo hizo durante la conferencia que ofreció en la facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Cádiz, un acto público organizado por el Ateneo de Cádiz con la colaboración de la UCA y Dragados.

El ingeniero duda que "el tramo móvil tenga utilidad puesto que el gálibo del tramo más alto del puente desde el nivel del mar es de 69 metros. Creo que ya es suficientemente alto", dijo, y acto seguido prefirió callar antes de seguir dando su opinión .

Manterola desmenuzó anoche todos los detalles de la futura plataforma ante un público de cerca de 200 personas entre ingenieros, estudiantes, miembros de Dragados y curiosos. La alcaldesa, Teófila Martínez, estuvo también presente. El ingeniero redactor del proyecto comparó el segundo puente sobre la Bahía con el puente Vasco de Gama (Portugal); el de Oresund, entre Dinamarca y Suecia, y el puente Severn, que une Inglaterra y Gales. Todos ellos, dijo, "con menos metros de luz que el gaditano, que contará con 540". Recordó que el nuevo acceso "es una de esas cosas que sólo se hace de vez en cuando", por lo que "Cádiz es afortunada". Será, además, "la obra más importante que se hará en España en mucho tiempo", pues es una obra "colosal". Fruto de su humildad, la primera imagen que proyectó fue la relación de personas que han trabajado y lo siguen haciendo con él en el proyecto. El público, sin embargo, no tuvo la oportunidad de plantear ninguna pregunta al ingeniero.