Las alarmas saltaron el pasado verano. Fotografías y vídeos protagonizados por roedores vistos en diversos puntos de la ciudad hacían temer la existencia de una plaga; y aunque el Ayuntamiento asegura que no se detectó incremento alguno y rechaza la existencia de plaga o similar -y el equipo de gobierno llega a hablar de "espectáculo mediático" o incluso de una estrategia del Partido Popular en las ciudades donde no gobierna- sí se ha realizado en estos meses un intenso trabajo que ha afectado a diferentes delegaciones municipales y que tenía como objetivo acabar con esa presencia de roedores en la ciudad.

La responsable de Salud, Eva Tubío, reconoce que "a raíz de salir en prensa" este asunto es cuando el gobierno "decide intervenir". Y entonces comienzan reuniones a diario y se aumentan los controles y cebos por toda la ciudad.

El 21 agosto se produjo una reunión de coordinación a la que asistieron el jefe del Parque Municipal, los directores de Salud, Medio Ambiente, Parques y Jardines, Urbanismo y Limpieza, junto con los respectivos concejales responsables para analizar la situación y tomar medidas, especialmente en aquellos apartados "más conflictivos". Entre ello, Tubío menciona a los solares abandonados, las murallas de Santa María del Mar y los parques y jardines. En esa reunión se acuerda también reforzar la limpieza y desinsectación de todo el alcantarillado, que ya se había hecho en junio y que se repetía entonces; y asimismo se decidió proseguir con el anillado de palmeras o limpiar el talud de la playa de Santa María del Mar (sitio donde había sido especialmente notoria la aparición de ratas).

Además, se dio orden a Urbanismo para requerir la limpieza de los solares abandonados a sus propietarios. A Policía Local para sancionar a aquellos que depositaran basuras fuera del horario establecido. A costas para que cubriera los agujeros existentes en la muralla de Santa María del Mar.

La empresa adjudicataria del servicio de control de plagas -servicio que estuvo sin empresa externa durante tres meses, del 15 de marzo al 12 de junio, aunque Tubío recordó que es un servicio mixto, por lo que el Ayuntamiento sí siguió prestándolo en ese período- reforzó el equipo con un operario más dedicado a la desratización, empleándose además raticidas distintos a los habituales, ante la posibilidad de que hubieran perdido efectos éstos.

Detalló Eva Tubío que se trataron y colocaron cebos en 6.024 pozos de la ciudad, localizándose solo 27 donde ha habido consumo -lo que significa un número muy bajo de presencia de roedores-. Y el concejal Álvaro de la Fuente indicó que la limpieza de la red y de los sumideros se mantiene a niveles de años anteriores, incluso con aumento de los metros lineales.

Este plan de choque finaliza con el requerimiento realizado a Costas y a la Autoridad Portuaria para que procedan a la limpieza de los bloques del Campo del Sur y de la Punta de San Felipe, "que lleva más de cinco años sin hacerse", explicó De la Fuente. Y con varias recomendaciones, entre las que se encuentran la de controlar las colonias felinas de la ciudad o la posibilidad que planteó Urbanismo de tabicar algunas fincas vacías.

Todo ello bajo constantes reuniones de coordinación entre todas estas áreas implicadas. Un auténtico plan de choque contra unos roedores que hicieron saltar las alarmas aunque desde el Ayuntamiento se insista en que la presencia se ha mantenido en el mismo número habitual de años anteriores. La próxima semana está prevista la reunión de la Comisión de Sostenibilidad en la que se dará debida cuenta de todo este proceso, del que advierte tajante Tubío: "En ningún momento se ha puesto en peligro la salud pública".