Los técnicos de Dragados iniciaron ayer los preparativos que darán comienzo a las obras del segundo puente sobre la Bahía en el término municipal de Cádiz, junto a la rotonda de Astilleros. Sobre las nueve de la mañana, varios operarios de la empresa constructora responsable de levantar el tercer acceso a Cádiz delimitaban la zona del paseo marítimo Puntales-La Paz que se convertirá en los próximos días en el escenario de actuación del Ministerio de Fomento.

De esta forma, los técnicos han iniciado el replanteo y acotado una zona de cerca de cien metros de largo mediante líneas discontinuas de color rosa. Una zona que incluye, como el resto del paseo marítimo, varios bancos, farolas y palmeras que deberán ser trasladados a otro lugar en caso de que obstaculicen el desarrollo de las obras. Así, los asientos se reubicarán en algún otro rincón de la barriada de la Paz y, en el caso de las palmeras, está previsto que se trasplanten en un lugar cercano a la rotonda de Astilleros. Y siguiendo con los planes de Fomento, a lo largo del día de hoy está previsto que comience la instalación de las señales de obra. A partir de entonces, y una vez formalizados todos los trámites municipales necesarios, los camiones de Dragados comenzarán a llegar a la zona para iniciar lo que será el estribo número uno del puente. De esta forma, arrancarían las obras del puente en la capital, pues hasta el momento la empresa constructora trabaja exclusivamente en el término municipal de Puerto Real.

El estribo número uno, todavía en tierra, cumplirá la función de conectar la rotonda de Astilleros con el nuevo acceso a la ciudad. Y, según la intención del Ministerio de Fomento, estará construido por un muro de 30,5 metros de longitud y su parte superior tendrá forma de C. El estribo pertenece al primer tramo del conjunto de la plataforma, de 45 metros de largo. La estructura que seguidamente soportará el puente será la pila número uno, a partir de la cual nace el segundo tramo. Este intervalo, de 477,50 metros de largo, se prolonga hasta la pila ocho, donde comienza el tramo móvil del puente.

Los trabajos de replanteo de ayer se producen después de que técnicos del Ministerio de Fomento trasladaran al Ayuntamiento su intención de comenzar los preparativos de las obras. En este sentido, Rafael Román, portavoz municipal socialista, aseguró el pasado fin de semana que el equipo de gobierno pretende retrasar el inicio de las obras del puente en la capital para así evitar que coincida con la visita prevista para el próximo día 10 de diciembre de José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba. A este respecto, fuentes del Ayuntamiento de Cádiz aseguran que "técnicos municipales y de Fomento llevan más de un mes trabajando sobre la ocupación de vía pública que solicitó el ministerio el pasado 10 de octubre para iniciar los trabajos". Un trámite que se puede alargar una media de "entre tres y seis meses". Tras llegar la solicitud al Consistorio "y estudiarse por técnicos de varias delegaciones, se solicitó a Fomento una documentación técnica que llegó el pasado 21 de noviembre y que han analizado los técnicos municipales al considerar que no sería necesaria la retirada de árboles, bancos y resto de mobiliario urbano de algunas zonas afectadas". El equipo de gobierno asegura que "el único problema que se ha planteado sobre el asunto lo ha provocado Rafael Román, que intenta por todos los medios que su jefe pueda hacerse una foto con una valla de obras".

En este sentido, el portavoz municipal del equipo de gobierno, Ignacio Romaní, asegura que "nos parece grotesco que Román sea incapaz de pelear durante 10 años por un puente en el que nunca creyó y se ponga nervioso ahora que viene Zapatero".