Cádiz

"Un golpe de Estado en toda regla"

  • El consejero delegado de Onda Cádiz critica que la oposición intente "descabalgarme"

David Navarro da la rueda de prensa en compañía de Joaquín Castro.

David Navarro da la rueda de prensa en compañía de Joaquín Castro. / jesús marín

"No entiendo por qué están barajando mi cese como consejero delegado en Onda Cádiz. Es un golpe de Estado en toda regla". El concejal del equipo de Gobierno David Navarro reaccionó ayer ante el anuncio de los partidos de la oposición de proponer su cese en la televisión pública municipal por su gestión. Ya lo hizo el día anterior cuando mantuvo una reunión con la plantilla de Onda Cádiz porque señalaba que había habido unas informaciones -la publicada por este periódico- que había hecho "saltar las alarmas y ha podido sembrar una incertidumbre dentro de la plantilla y mi labor y mi obligación era la de tranquilizar y transmitir la información que desde el equipo de gobierno pudiéramos tener, que es poca". Un día se reúne con la plantilla y al día siguiente da una rueda de prensa para defender el actual modelo de gestión en Onda Cádiz, comparecencia en la que estuvo acompañado por el director-gerente de la misma, Joaquín Castro.

Su salida no sería, a su juicio, un golpe de Estado contra él "sino contra la independencia, la libertad en el trabajo de toda la plantilla de OC. Lo digo así de claro".

Y es que Navarro trató de enfrentar ayer dos modelos de televisión: uno, el que se ha implantado en estos dos últimos años en Onda Cádiz "para convertirse en una televisión pública, plural, independiente, de calidad y de referencia"; el otro, "el del PSOE en Canal Sur o el del Partido Popular en Televisión Española, aquí con el beneplácito de Ciudadanos". También renegó del "modelo del autobombo" que instauró el gobierno del Partido Popular en Onda Cádiz "donde todas las delegaciones desviaban un dinero hacia la televisión municipal para financiar las campañas de autopromoción de la concejala Martínez". A su juicio, era un modelo basado "en el maquillaje, la inoculación y el gaseo permanente para inocular lo bueno que eran ellos y lo malos que éramos los demás".

Y en esta catarata de críticas a la oposición se detuvo especialmente en Ciudadanos, del que dijo que está "dispuesto a venderse a lo que sea con tal de tener un poco de cuota y de control. No hay otra".Navarro relató que el modelo que tiene la oposición "es la de intervenir directa y políticamente en todo lo que tiene que ver con los contenidos". Como contraposición puso de ejemplo a la actual Onda Cádiz, que el mismo Consejo Audiovisual Andaluz la pone como "paradigma de la pluralidad" en las televisiones públicas andaluzas: "Antes el 83% se dedicaba al equipo de gobierno y ahora es el 49%". Ahora, asegura, que ni él ni ningún miembro del equipo de gobierno ha interferido en el trabajo de los profesionales de Onda Cádiz "y todos los logros y objetivos conseguidos han sido gracias a ellos". Así, no entiende que "me quieran descabalgar", aunque entiende que "ahora estoy en la diana". Sin embargo afirma que quieren sacarle de un puesto "en el cual yo no tengo ningún tipo de competencia o relación directa".

Navarro también defendió dentro de la gestión el ahorro de casi dos millones de euros y negó que tenga responsabilidad en que las cuentas generales no se hayan aprobado antes del 30 de junio, para lo cual también señaló a la oposición: "Al no haber presidente, no hay quien pueda convocar el consejo de administración y para ello tienen que ser al menos cuatro consejeros. Las cuentas están hechas antes del 30 de junio pero llevamos todo el verano buscando el cuarto consejero con el resultado que se podrán imaginar".

Al final Navarro también deslizó el discurso del miedo, sobre todo en lo que puede afectar a la plantilla, ya que afirmó que desde la oposición se le ha indicado "en alguna ocasión relevos con nombres y apellidos dentro de la plantilla y el organigrama de Onda Cádiz Televisión".

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