El Ayuntamiento pretende poner en marcha en el primer trimestre de 2018 el centro de día de baja exigencia para la atención de las personas sin hogar. Este recurso, que se va a instalar en la antigua sede de la AVV de San Juan, en el Campo del Sur, viene a sumar un nuevo servicio a los sintechos para ofrecerles ayuda, formación e información fuera del Centro de Acogida Municipal, que tiene unas normas menos flexibles por funcionar como albergue.
Esta intención municipal es el fruto del paso que se dio ayer en la Junta de Gobierno Local con la aprobación del pliego de condiciones para las obras de adecuación de este edificio municipal para adaptarlo a las necesidades de este centro de día para indigentes. Para ello, el presupuesto de licitación es de 259.855 euros.
La concejala de Asuntos Sociales, Ana Fernández, no ofreció ayer en rueda de prensa muchos detalles sobre el futuro funcionamiento de esta nueva dependencia municipal, cuya estimación de apertura que hizo dependerá de los plazos tanto para la adjudicación de las obras como de su realización, aunque sí explicó que la reforma no será demasiado profunda.
Fernández esbozó algunas de las ideas que maneja la delegación que dirige para la gestión de este espacio, que es una demanda surgida de la Mesa de Personas sin Hogar y de diversos colectivos. Uno de los aspectos que precisó fue que el centro no se habilitará para pernoctar en él regularmente, pero estará disponible si fuera necesario para la ampliación del número de camas durante determinadas jornadas en la campaña del frío o por fuertes lluvias.
Con esta premisa, Fernández señaló que el centro de día va a funcionar "como espacio donde iniciar el proceso de integración, donde podamos hacer una intervención más cercana y, por supuesto, dar cobertura para que tengan un espacio para poder estar al ser de baja exigencia, con menos reglamentación, con menos exigencias y facilitándoles ese comienzo de integración para que puedan llevar una vida normalizada, que es el objetivo final de todas las intervenciones".
Aunque todavía no se ha cerrado la cartera de servicios ni la reglamentación para el funcionamiento de este recurso municipal, Fernández apuntó que, dentro de este "espacio más amable", la intención es que puedan acudir las personas que no quieren ir a los albergues por la rigidez de sus normas y se trate una relación con los sintechos "para poder ofrecerles recursos y solucionar todas las posibles necesidades que puedan tener". De hecho, en el desarrollo del funcionamiento de este espacio se va a tratar de estudiar "las referencias de otros centros", de manera que se podrá ver "lo que funciona y lo que no" para conseguir los objetivos que se han propuesto alcanzar.
Así, entre los planes municipales se encuentran la realización de "unos itinerarios con cada persona con la que se vaya interviniendo", así como la cobertura "a las necesidades que tengan".
Con todo, la concejala de Asuntos Sociales se vanaglorió de "los avances que hemos ido dando con el aumento de las campañas del calor y del frío o la posibilidad del padrón, que es una reivindicación histórica de la Mesa de Personas sin Hogar que permite a estas personas acceder a la sanidad y a todos los derechos que son de todos".
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