El equipo de Gobierno está dispuesto a realizar un nuevo pliego para sacar a la venta los locales de la tribuna del Estadio Carranza en unas condiciones que favorezcan cerrar una operación. Así lo anunció en la mañana de ayer el teniente de alcalde de Urbanismo, Martín Vila, tras la Junta de Gobierno Local. Eso sí, de momento se está estudiando cómo se va a enfocar y no adelantó si se va a producir a una división en varios módulos. Hasta el momento el Ayuntamiento de Cádiz no ha podido venderlo por los 9,8 millones de euros por los que salió a concurso.

Martín Vila también se mostró muy crítico tras la Junta de Gobierno Local con la decisión de la Zona Franca de Cádiz de no ejercer la compra gratuita del hotel para el estadio y que había sido ofrecida por el Ayuntamiento: "La Zona Franca de la mano del Partido Popular y del Partido Socialista vuelve a dar la espalda y a posicionarse en contra del interés común de la ciudad de Cádiz".

Desde el Gobierno local se considera que el convenio firmado en el año 2013 entre Zona Franca y el Ayuntamiento "era un timo, una estafa del PP que utilizó como excusa para generar una deuda de casi 40 millones en las arcas municipales".

Vila afirma que el PP debería explicar por qué firmó ese convenio con Zona Franca si no tenía previsto comprar el hotel. El edil cree que "aquí hay algo que se nos escapa y que huele raro". En este sentido añade que "quizás es que el convenio no era más que una excusa cutre para justificar el desembolso de este dineral que nos ha dejado un agujero enorme en las arcas municipales".

Vila también incidió en el hecho de que los representantes del PP y el PSOE en el Comité Ejecutivo, Ignacio Romaní y Fran González, "hayan vuelto a coincidir esta vez para impedir que se ejecute esta opción de compra". En este caso los dos partidos se abstuvieron y el resto de los representantes de las distintas administraciones votaron en contra.

Desde el gobierno local reconocen que habían llegado a pensar que esta vez "el PP cumpliría con Cádiz, pero de nuevo volvemos a ver que traiciona a quienes confiaron en ellos, que ya cada vez son menos. Y lo hace para servir a no sé qué intereses privados o partidistas".

La no venta del Estadio Carranza ha traído problemas también en las cuentas municipales del pasado año ya que se consignaron los 9,8 millones de euros como ingresos con gastos relacionados al mismo.