El Ayuntamiento de Cádiz asume a través de la empresa municipal de suelo Procasa la construcción de las 13 viviendas sociales en la finca de la calle Cruz, 11, que desde hace años presenta mal estado de conservación.

Para ello se ha destinado una partida de 843.000 euros (Iva incluido) procedentes de la distribución de dividendos e ingresos de Eléctrica de Cádiz que han pasado a cuentas municipales, tal y como fue aprobado en el pleno del pasado lunes.

Según fuentes municipales, está previsto que las obras arranquen antes de final de año, con un plazo de ejecución de 12 meses.

Así, entre las próximas actuaciones pendientes figura la modificación del régimen para el uso de las viviendas, pues se contemplaba que fuera para venta directa, mientras que ahora pasará a régimen de alquiler social. De modo que en breve se procederá a tapiar la totalidad de la finca "por motivos de seguridad", hasta que inicie la obra.

En total serán trece las viviendas las que se levanten en esta casa del siglo XIX con cuatro plantas de altura, la última de las cuáles se retranqueará respecto a la fachada de la calle Cruz. Cuenta con una superficie total construida de 992 metros cuadrados y de 727 de superficie útil. Del total de viviendas, dos serán de 1 dormitorio, con casi 50 metros útiles; nueve viviendas de dos dormitorios, de entre 51 y 57 metros útiles y otras dos viviendas de tres dormitorios, que tendrán entre 70 y 75 metros útiles, de manera que la superficie útil total es de 727 metros cuadrados.

Teniendo en cuenta que el grado de protección de la vivienda es 3, según establece el PGOU gaditano, en la obra de rehabilitación "se mantendrán las tres fachadas actuales, realizándose una reordenación de huecos y una reestructuración integral del interior del edificio", explican desde el Consistorio.

Precisamente el grado de protección de la finca contemplada en el último Plan General de Ordenación Urbana ha mantenido durante unos años en el aire esta intervención, debido a que inicialmente estaba prevista la demolición total de la casa. Esto llevó al replanteo del proyecto para mantener la fachada.

El otro de los obstáculos que ha impedido el desarrollo de la obra fue la financiación, que como publicó este medio quedó paralizada temporalmente por las entidades bancarias cuando se concedió una partida para la actuación en la comandancia de la Guardia Civil. Ahora, todo parece resuelto gracias a dicho expediente de la modificación de créditos y el expediente extrajudicial de créditos que permite a las cuentas municipales disponer de 2.920.603 euros procedentes de Eléctrica de Cádiz y que se destinarán a fines sociales.