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reunión de la coprepa en cádiz El Oratorio de San Felipe acogió su encuentro

Presidentes de Parlamentos llaman a la unidad para superar la crisis

  • Aprueban una declaración institucional en la que consideran que hay que evitar "enfrentamientos estériles" y se autoimponen la complicada tarea de crear empleo

Unidad ante la crisis. Solidaridad y esfuerzo común como receta para recuperar la confianza. Esas son algunas de las recomendaciones que los miembros de la Conferencia de Presidentes de Parlamentos Autonómicos (Coprepa) lanzaron ayer tras su reunión en el Oratorio de San Felipe Neri, el mismo lugar donde hace 200 años se firmó la Constitución de 1812, que ayer recibió otra retahíla de piropos, y donde aprobaron una declaración institucional en la que consideran que la grave situación que padece el país requiere "el esfuerzo conjunto y decidido de nuestras instituciones".

Arantza Quiroga, presidenta de la Coprepa y del Parlamento Vasco, fue la encargada de dar lectura a la declaración en la que se destaca que España se enfrenta a una grave coyuntura histórica y sus ciudadanos sufren "una crisis profunda ante la pérdida de empleo y las consecuencias de los ajustes estructurales de fuerte impacto social".

Quiroga destacó que La Pepa fue la piedra angular "de nuestro edificio constitucional" y que entonces España ya superó una crisis provocada "por la invasión napoleónica".

La declaración consta de siete puntos y entre sus directrices se encuentra "el principio de subsidariedad", el papel activo que las cámaras legislativas deben jugar en la búsqueda de soluciones ante la crisis, "que las Cortes de Cádiz influya de manera decisiva en la historia parlamentaria de España, como una característica esencial de "nuestras instituciones políticas, modelando la democracia y fundando la convivencia social con los valores de tolerancia, justicia, igualdad de oportunidades y solidaridad".

El tercer punto considera que esa libertad que sirve de base a las instituciones democráticas, "debe materializarse en la amplia protección de los derechos de la persona, en la promoción de una ciudadanía comprometida con su comunidad y en el fortalecimiento del Estado Social y Democrático de Derecho".

Igualmente, la conferencia señaló que su preocupación fundamental debe ser la "creación de empleo, uno de los grandes problemas de nuestra población, con especial atención a la incorporación de los jóvenes al mercado laboral, apoyando el emprendimiento y la recuperación económica. Todo ello acompañado de políticas en defensa de las conquistas sociales alcanzadas con el continuado esfuerzo de todos en la andadura democrática".

Además, acordaron rendir homenaje a la memoria de los constituyentes de las Cortes de Cádiz de 1812. "Debemos inspirarnos en su ejemplo, empleando lo mejor de nuestra intuición creativa para buscar alternativas acordes con nuestra realidad, enraizadas en nuestra cultura cívica".

Consideraron igualmente que los parlamentos aproximen su actividad a la ciudadanía y ofrezcan instrumentos "que favorezcan un mejor conocimiento de la vida parlamentaria".

Por último, indicaron que sólo colaborando de manera solidaria "superaremos las dificultades que nos atenazan" y expresaron en voz alta la necesidad de dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos "propiciando el progreso social".

Antes de que Arantza Quiroga leyera este manifiesto, Manuel Gracia, presidente del Parlamento andaluz, recordó las palabras que el Rey Juan Carlos I pronunció durante la celebración el 19 de marzo del Bicentenario. "Si la Pepa se hubiera mantenido se hubieran evitado muchas desigualdades y hubiera sido de gran utilidad para la consolidación de valores como la tolerancia y la dignidad".

Gracia exigió a sus compañeros dar "respuesta a los desafíos a los que nos enfrentamos" y se preguntó "¿cuál sería el espíritu de los constituyentes del Doce si vivieran hoy?". También se mostró tajante a la hora de expresar la necesidad de "reafirmar el modelo de las autonomías" y defendió un modelo "que no discriminen a unas frente a otras".

Por su parte, el presidente del Senado, Pío García-Escudero, llamó a la unidad frente a la crisis económica que atraviesa España, asegurando que "no es momento para fabricar diferencias ni para ensimismarse en particularismos de corto alcance", sino de entendimientos y acuerdos "para avanzar juntos en busca de objetivos comunes".

García-Escudero señaló en su intervención que "por encima de las barreras geográficas e ideológicas" deben estar "nuestras referencias comunes como españoles y demócratas", referencias que ha enumerado como la salvaguarda de los derechos y libertades; el "refuerzo" de las garantías democráticas de nuestras instituciones; y la "búsqueda incansable del progreso y de unas condiciones de bienestar de las que nadie quede excluido".

El presidente de la Cámara Alta se ha referido a la crisis económica que atraviesa nuestro país aseverando que de la misma "sólo saldremos aparcando las diferencias y actuando como lo hicieron en 1812 o, en tiempos más recientes, como supimos hacerlo con el consenso constitucional de 1978. Si nuestra meta es común, sería incomprensible que no avanzáramos juntos hacia su consecución".

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