La Fundació Puigvert y el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau han aplicado una nueva técnica de reconstrucción total de pene. La intervención quirúrgica, llevada a cabo por un equipo multidisciplinar, permite al paciente, un senegalés de 26 años al que le había sido amputado el miembro en la guerra civil de Costa de Marfil, recuperar tanto sus principales funciones sexuales -es decir, la sensibilidad erógena, la eyaculación y el orgasmo-, como la capacidad reproductiva.

La operación, de 10 horas, estuvo dirigida por el director del Servicio de Andrología de la Fundació Puigvert, Eduard Ruiz Castañé, y el director del Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora del Hospital de Sant Pau, Jaume Masia, y consistió en sacar parte del músculo del antebrazo del paciente con el que se ha reconstruido el cuerpo del nuevo pene y su piel, mientras que la piel del mismo antebrazo se ha utilizado para crear una nueva uretra.

La selección del antebrazo para realizar esta reconstrucción no fue arbitraria, sino que fue elegida porque su músculo es el único que está vascularizado y, por longitud y grosor, se adecua mejor a las características de un pene.

Paralelamente a la reconstrucción del cuerpo del pene, el Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau procedió a la reconstrucción estética del glande.

Una vez reconstruidas ambas partes, se procedió a empalmar, aprovechando los nervios, el nuevo pene con la femoral y la vena safena. Dado que el sistema genital masculino reproductivo del paciente -testículos, próstata y vesículas seminales- está intacto y, por tanto, mantiene la fertilidad y la producción hormonal, se ha conseguido preservar la sensibilidad y la posibilidad de llegar al orgasmo y la eyaculación. Ahora, en un periodo de seis meses, se implantará al paciente una prótesis hidráulica de pene, lo que le permitirá tener una erección normal y realizar coitos.