Con más de 1.400 alumnos en nómina y una larga lista de espera de isleños -unos 700- que se han quedado fuera y no han podido formalizar su matrícula porque el centro está al límite de su capacidad, la Escuela Oficial de Idiomas confía en contar por fin con una nueva sede cuando arranque el próximo curso escolar: las instalaciones de la escuela de Infantil Nuestra Señora del Carmen, de las que en junio de 2016 saldrán los últimos 75 alumnos que quedan tras el traslado progresivo de sus líneas a otros centros de la zona que se ha estado llevando a cabo durante los últimos dos años.

Es la propuesta que baraja la Delegación Territorial de Educación y el compromiso que el PSOE isleño trasladó a los alumnos antes de las elecciones municipales. "El edificio, que es propiedad de Defensa y está cedido a la Junta, solo puede ser dedicado a la enseñanza. Por eso se pensó que podía trasladarse allí la Escuela de Idiomas", advierten a la par José Carlos Vara Llerena y Cristina Pita Vera, presidente y secretaria de una asociación de alumnos que insiste en una histórica reivindicación que ahora vislumbra una oportunidad de oro para poder llevarse a cabo.

La EOI, la Escuela Oficial de Idiomas, ha cumplido 23 años de vida en San Fernando, los mismos que lleva a la espera de una sede propia y definitiva, los mismos que ocupa de manera provisional unas instalaciones que comparte con el IES Jorge Juan en la avenida Duque de Arcos, con las múltiples contrariedades y achaques que ello supone.

"Contar con una sede propia fue además el requisito que se planteó en su momento para conseguir la oficialidad de la Escuela de Idiomas", recuerda Pita. Se trata de una carencia que La Isla arrastra desde hace ya demasiado tiempo -el anterior alcalde, José Loaiza, llegó incluso a ofrecer a la Junta este mismo año una parcela en la calle Argentina (Camposoto) para que acometiera la construcción de unas nuevas instalaciones para la EOI- y que ahora ve una salida ante los planes que Educación tiene para la escuela de Infantil Virgen del Carmen. El edificio, advierten desde la asociación de alumnos, reúne las condiciones necesarias, si bien habría que llevar a cabo previamente su adecuación.

Y eso es precisamente lo que reclaman, que se ponga en marcha todo el proceso, que se empiece a redactar el proyecto para que no haya lugar a retrasos, que se elabore un plan de actuación para abordar ese traslado y las obras de adecuación que habrá que llevar a cabo, que se concrete y resuelva la inversión que necesita realizarse en estas instalaciones para que pueda convertirse en la nueva EOI. Lo ideal -señala el presidente de la asociación de alumnos- sería que las obras pudieran comenzar en cuanto acabe el curso. "Puede que el edificio no esté listo en septiembre de 2016 pero quizá sí podría plantearse el traslado de la Escuela Oficial de Idiomas a partir de enero del siguiente año", advierte. El colectivo, de hecho, ha solicitado una reunión con la alcaldesa, Patricia Cavada, al objeto de exponerle sus demandas, abordar el asunto y pedirle que desde el Ayuntamiento se haga todo lo posible por impulsar esta actuación con la Delegación Territorial de Educación.

El colectivo, que representa a millar y medio de isleños, recuerda que la demanda de idiomas se ha multiplicado en la ciudad a causa de los nuevos requisitos legales. La acreditación del B1 se pide para cualquier titulación universitaria y para acceder a determinadas plazas públicas. Y eso se ha traducido directamente en un incremento de solicitudes en la Escuela Oficial de Idiomas, "que es además un modelo perfecto porque ofrece una enseñanza de mucha calidad, cuenta con un nivel bastante alto y es una fórmula que solo tiene España y que incluso es envidiada en el resto de Europa", advierten los representantes del alumnado.

El problema es que el centro, al carecer de sede propia, estaba ya al límite de su capacidad y ha sido incapaz de atender toda esa demanda. "Hay muchísima gente que se ha quedado fuera. Hablamos de 600 o 700 personas que no se han podido matricular en este curso que ha comenzado en septiembre", señala José Carlos Vara.

Contar con unas instalaciones propias en el colegio Virgen del Carmen permitiría atender correctamente esa creciente demanda -recuerdan los alumnos que se trata de una enseñanza pública a la que se accede por muy bajo coste- y ampliar los horarios de la Escuela Oficial de Idiomas para impartir clases también por las mañanas (actualmente, solo puede hacerlo por las tardes al compartir el espacio con el instituto, lo que limita a la EOI que incluso se ve afectada por las actividades vespertinas que se organizan en el centro).

También, advierten, abriría la puerta a la enseñanza de otros idiomas ya que actualmente solo se imparten tres: inglés, francés y alemán. "Podrían añadirse otros idiomas que cada vez son más demandados por la sociedad, como el chino, el italiano e incluso clases de español para extranjeros", advierten desde la asociación de alumnos. Además, podrían ampliarse los niveles de formación ya que, actualmente, hay que desplazarse a otras localidades -Chiclana, sobre todo- para continuar los estudios tras conseguir la certificación del B2.