Un tramo del sendero de la Punta del Boquerón, zona catalogada como Monumento Natural por la Junta de Andalucía desde 2003, ha sido objeto de actos vandálicos de gravedad que han destrozado por completo parte de la pasarela de madera que conduce hacia la batería de Urrutia, casi al final de la ruta.

Los daños fueron advertidos el pasado fin de semana por usuarios que utilizan con frecuencia este sendero que conduce a la Punta desde la playa de Camposoto, en pleno Parque Natural de la Bahía de Cádiz. Probablemente, los destrozos se produjeron entre la jornada del viernes y el sábado aunque resulta difícil determinarlo con exactitud.

La denuncia llegó a las oficinas del Parque Natural el lunes, como explicaba ayer su director, Antonio Gómez, que tildaba de "auténtico sabotaje" estos actos vandálicos perpetrados dada la dimensión de los destrozos ocasionados, cuyo coste todavía no se ha podido cuantificar. Los daños afectan especialmente a la estructura de madera que salva la zona del caño a escasos metros de la batería de Urrutia. Literalmente -sostiene- "las maderas ha sido arrancadas de cuajo".

La zona, a lo largo de esta semana, ha sido examinada en un par de ocasiones para evaluar el alcance de los estropicios. En la misma mañana de ayer, de hecho, se llevó a cabo una de estas inspecciones. La dimensión de los daños ocasionados hace pensar a los responsables del Parque Natural que tras esta lamentable actuación hay una "intencionalidad". "Lo que se ha hecho va más allá de una simple gamberrada. Supone una acción organizada que además requiere de la participación de al menos varias personas", cree Antonio Gómez.

De hecho, la estructura de la pasarela se ha visto seriamente afectada en este tramo del sendero, lo que complica la accesibilidad a la Punta del Boquerón aunque no la impide del todo (eso sí, en caso de mareas altas puede resultar más difícil). Se cree incluso que estos destrozos pudieran haber sido ocasionados para evitar los controles que periódicamente se llevan a cabo en esta zona donde está prohibida la acampada libre y que ahora, en plena temporada estival, se han intensificado para garantizar la correcta conservación de este Monumento Natural.

Las oportunas reparaciones se llevarán a cabo tras el verano, entre los meses de septiembre y octubre. De esta forma, se quiere evitar ocasionar molestias a usuarios y bañistas en pleno mes de agosto, que es cuando mayor afluencia registra el sendero a lo largo de todo el año. Además, se aprovechará para repasar todo el sendero en su conjunto, según explicaba a este periódico el director del Parque Natural. No obstante, para solventar el problema que han originado estos actos vandálicos, se llevarán a cabo a partir de la próxima semana arreglos provisionales en este tramo.

La zona de la Punta del Boquerón, por otro lado, se ha visto nuevamente afectada por los problemas de limpieza que suelen aquejarla cada verano, especialmente durante los fines de semana, que es cuando mayor afluencia de bañistas registra este espacio natural.

Aunque el Ayuntamiento tiene habilitados contenedores de residuos y limpia la zona dos veces por semana, los desperdicios -en muchas ocasiones, por la conducta incívica de la gente- se acumulan en la zona o se esparcen por el entorno si sopla el viento con fuerza o si algún animal rastrea la basura.

Su lejanía dificulta además cualquier intervención, por lo que a menudo pasan unos días antes de que se recoja la basura. Este problema tuvo una especial incidencia en el verano pasado e incluso obligó a adoptar medidas extraordinarias por parte del Ayuntamiento. Este año -aseguran algunos de los usuarios que frecuentan la zona- la situación está más controlada, aunque durante los fines de semana se repite el problema.