Los datos refrendan la sensación de que San Fernando es una ciudad segura, con una bajada en lo que va de año de un 2,6% del número de delitos y faltas. Lo desvelaba ayer el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, tras la junta local de seguridad en la que se trataron algunos detalles vinculados al convenio para la adhesión del Ayuntamiento al protocolo de protección de las víctimas de violencia doméstica y de género, ámbito en el que La Isla presenta pocos casos.

"Éstas son las cifras, luego están los delitos y las faltas que se evitan como consecuencia de la actuación policial, que son mucho más importantes que las propias estadísticas", comentó De Torre, que habló de una ciudad donde no existe un problema de seguridad y "donde los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado trabajan bien en colaboración con la Policía Local". La tendencia de San Fernando a ser un municipio tranquilo se demuestra con los datos. Para empezar, con el descenso de media de faltas y delitos en un 2,6%. Concretamente los delitos bajaron en un 3,72% y el total de faltas en un 2,16%.

En el grupo de los delitos, ha descendido, destacó el subdelegado del Gobierno, aquellos relacionados con la seguridad subjetiva -la que más notan los ciudadanos-. En un 16,22% se han reducido los robos con fuerza en domicilio. El porcentaje en cuanto a la bajada de los robos con fuerza en locales se sitúa en un 40,26%. Finalmente, de robos con fuerza e intimidación hubo un 4,76% menos. "Todo esto no nos hace bajar la guardia, y por eso son importantes las juntas de seguridad local para garantizar esa colaboración y coordinación, afirmó. Su importancia se centra en que permite ver qué evento pueden producir inseguridad y prevenirla con los medios que disponen en la medida que sea posible. De Torre declinó ofrecer datos exactos sobre víctimas de malos tratos, "no nos gusta hacerlo", aunque sí destacó que la población en riesgo apreciable que está en grado bajo es el 90%, y el 10% restante en grado medio. No hay ni de grado alto ni extremo.