El ministro de Interior, Pérez Rubalcaba, el consejero de Gobernación de la Junta, Pizarro, y el secretario provincial del PSOE, González Cabaña, en Benalup.

0 comentarios 0 votos      El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, llegó ayer a Benalup en ronda informativa para explicar por qué el Gobierno bajará el sueldo a los funcionarios y por qué la mayoría de los pensionistas cobrará el 1 de enero de 2011 lo mismo que cobró el 1 de enero de 2010. Hay otras cuestiones en el plan estatal de recortes pero éstas son cruciales. Es algo "difícil de explicar", admitió el ministro, "pero eso no quiere decir que vayamos a renunciar a que todo el mundo comprenda la situación", se empeñó ante dos centenares de afiliados, simpatizantes y colegas del partido.

El titular del Interior defendió que las medidas adoptadas son "impopulares pero necesarias en un contexto de crisis mundial y europea", que "no favorecen al partido del Gobierno" y que, de hecho, han llevado al PSOE a "la peor situación en todos sus años de gobierno"; unas medidas que suponen pedir "un sacrificio a los ciudadanos, en especial a los pensionistas y a los funcionarios" ante la "amenaza" que está sufriendo el Estado del bienestar: "para que lo entendáis con claridad, estamos hablando de pensiones, educación, sanidad, dependencia y subsidio por desempleo". "Tenemos que garantizar el futuro de estos principios básicos que hemos tardado muchos años en conseguir. Es nuestra responsabilidad en una encrucijada histórica en el que un partido tiene que elegir entre sus intereses y los de la sociedad", argumentó Rubalcaba.

El ministro, en versión pedagógica, reiteró su petición de "un esfuerzo", "un sacrificio de todos para pagar en un año y medio en lugar de en cuatro las deudas a los mercados que nos prestaron dinero (un dinero que pedimos para acometer políticas sociales) y que ahora han desconfiado de nuestra capacidad para devolvérselo".

Rubalcaba también subrayó que España es un país "solvente y serio" que paga sus deudas, "de gente que trabaja y que sabe hacer bien las cosas", y criticó que, en un momento en el que está "en juego" la imagen del país, el PP se dedique a comparar España con Grecia o con Hungría. "No hacen daño al Gobierno sino a los españoles, a todos", subrayó el ministro. "Esto no es divertido porque las cosas no están para bromas", aseveró.

El ministro del Interior reclamó que no se confunda "el gobernar, el tomar decisiones, con el improvisar", porque entonces "todos los gobiernos del mundo estarían improvisando frente a la crisis", y tachó de "rotundamente falso" que el PSOE haya sacrificado su política social, un argumento esgrimido por toda la oposición. Empleó cifras: 100.000 millones anuales dedicados a la educación y sanidad, "algo más" para las pensiones, unos 17.000 millones anuales en desempleo y una partida de 5.000 en dependencia.

El consejero de Gobernación de la Junta de Andalucía, Luis Pizarro, y el secretario provincial del PSOE, Francisco González Cabaña, flanquearon a Rubalcaba en Benalup. Cabaña encontró entre los lemas de la Revolución Cubana unas palabras de aliento para la familia socialista en estos tiempos "extraordinariamente" difíciles. En su pueblo, proclamó aquello de que "resistir es vencer".