Provincia de Cádiz

Bienvenidos al futuro

  • La Junta, Navantia, Airbus, pymes y la UCA firman la construcción a partir de 2017 del Centro de Fabricación Avanzada, llamado a ser el principal actor de la "revolución industrial" de Cádiz

Pocas veces la provincia de Cádiz ha tenido en su mano una oportunidad tan clara para romper con su pasado industrial, aprovechando la experiencia, para encaminarse a un futuro prometedor. Es, a priori y sobre el papel, la clave de lo que pretende una nueva apuesta que nace de la colaboración público-privada y que, además, no es una colaboración cualquiera. 

Ayer, en Puerto Real, se vivió una imagen única, casi histórica: la firma de un acuerdo para poner en marcha una nueva iniciativa basada en la investigación y la tecnología para aplicarlas a los procesos productivos industriales de los dos sectores que han sido y son clave en la provincia, el naval y el aeronáutico. Ayer, la Junta de Andalucía, Airbus, Navantia, la Universidad de Cádiz, el clúster marítimo naval de Cádiz, y el clúster aeroespacial andaluz (Hélice) sellaban con la firma de sus máximos representantes un protocolo para construir el Centro de Innovación Tecnológica y Fabricación Avanzada de Andalucía, el CFA. Máximo nivel de representación institucional y empresarial, con la presidenta de la Junta, Susana Díaz; de Navantia, con José Manuel Revuelta; y de Airbus Operaciones, Rafael González Ripoll; el rector de la UCA, Eduardo González Mazo; del clúster Hélice, con Joaquín Rodríguez Grau; del clúster naval, con José María Camacho; o de la Agencia IDEA, con su director general, Antonio González Marín. Fueron los firmantes de algo que está llamado a ser "la fábrica del futuro".

 

Todos insistieron en ello. Las empresas del futuro, si quieren seguir aspirando a crecer y tener cuota de mercado, tienen que hacerlo pasando por la innovación y la transferencia de conocimiento. En ese marco es donde tiene cabida el CFA. Comenzará a construirse en 2017 y ocupará una parcela de 30.000 metros cuadrados en el polígono El Trocadero, detrás de la antigua fábrica de Delphi, y frente a la factoría puertorrealeña de Airbus. En este edificio habrá laboratorios, talleres, espacio para la investigación y fabricación. Todo lo necesario para que las dos empresas tractoras de ambos sectores, Navantia y Airbus, desarrollen nuevos elementos que se traduzcan en poco tiempo (todos insistieron en que la velocidad es una de las claves) en nuevos productos de mercado que sean el elemento diferenciador para las empresas gaditanas. 

 

Ahí tendrá su espacio fundamental la Universidad de Cádiz. Su máximo responsable ya lo dijo ayer: es su función como organismo público, y se mostró dispuesto a emprender este nuevo camino. Y las empresas auxiliares. José María Camacho, presidente del clúster marítimo naval de Cádiz, habló ayer de la tradición de un sector, el naval, que acaba de abrirse a nuevas fronteras, como el mercado eólico marino. Reconoció que todas estas pymes que forman ese tejido vital para que Navantia se abra camino, necesitan innovar y actualizarse, pero también reclamó tener información de primera mano de hacia dónde caminan las empresas tractoras, de saber sus planes y de compartir conocimientos.

 

Porque esa es otra de las claves. El CFA estará en Puerto Real pero sus resultados serán exportables a todos, desde Airbus o Navantia hasta las 190 empresas auxiliares de la provincias (150 del sector naval y 40 del aeronáutico, como recordó en su intervención la presidenta de la Junta). Todas tendrán en su mano la responsabilidad de aplicar los nuevos productos que se consigan sacar del CFA para difundirlos y después venderlos. 

 

Eso sí, como recalcó el presidente del clúster Hélice, solo en el sector aeronáutico se prevén unas ventas de 36.000 nuevos aviones, con una facturación de 5 billones de dólares en los próximos 20 años. Sólo aquellas empresas que estén preparadas tecnológicamente accederán a ese mercado, recordó Joaquín Rodríguez Grau. Y añadió que "este centro habla de tecnología y de innovación, de la proximidad a las empresas. Este centro está llamado a vivir de la mano de las empresas y a desarrollar tecnología que mañana esté en una línea de fabricación aeronáutica o naval. De la mano de esa tecnología vendrá el aumento de productividad. La robotización, ante todo; realidad virtual, equipos sensorizados, la factoría del futuro, la industria 4.0. Es lo que esperamos del CFA y es lo que puede hacer que en los próximos 20 años las empresas andaluzas compitan en costes, calidad y seguridad con México, Marruecos, India y China".

 

Pero fue, sin duda, el presidente de Navantia, el que aportó más pistas sobre lo que será este nuevo centro de excelencia. Surge de la iniciativa de la Agencia IDEA, contará con la financiación que llegue de la ITI (Iniciativa Territorial Integrada), pero sus primeros pasos serán para el beneficio mutuo de la empresa pública de construcción naval, de Airbus y de sus empresas auxiliares. De hecho, José Manuel Revuelta desveló, por ejemplo, que ya se han producido las primeras reuniones de equipos de trabajo mixtos de ambas empresas para ver qué se puede hacer en el CFA. Y Revuelta destacó que Navantia ya ha detectado incluso los primeros productos que, a su entender, serán necesarios: "Fabricación aditiva, robótica móvil para áreas de difícil acceso; soldadura híbrida láser, vehículos autónomos para control dimensional e inspección, modelización y simulación de flujos y logística del astillero; prototipo rápido de sistemas en entornos de pruebas ágiles; y desarrollo de demostradores tecnológicos para transferencia de cadena de suministros. Navantia no puede ser ajena al proceso de digitalización que, como parte de la cuarta revolución industrial, estamos viviendo", afirmó.

 

También insistió en estos argumentos el presidente de Airbus Operaciones, Rafael González Ripoll. Dijo ayer que este futuro centro "servirá para atraer a otros colaboradores, tanto desarrolladores como empresas industrializadoras. Airbus y Navantia guiarán y orientarán los trabajos hacia objetivos industriales que aporten valor. No se trata de hacer ejercicios académicos, tiene que traducirse en productos, en mejoras de procesos y ganar eficacia y competitividad. El interés del CFA para Airbus no es solo disponer de instalaciones para desarrollar proyectos, sino contar con colaboradores y formación adecuadas en un modelo compartido que cree nuevas ideas y el caldo de cultivo necesario para una rápida puesta en el mercado de esas innovaciones. El CFA ya ocupa por derecho propio un lugar preferente entre las principales regiones aeronáuticas del mundo y será un importante vehículo para la generación de un polo tecnológico de excelencia". Y finalizó: "Que este acrónimo, CFA, tenga otro significado: Construyendo Futuro para Andalucía".

Y la última en intervenir fue la presidenta de la Junta. Susana Díaz mostró todo el apoyo institucional a una iniciativa. Lo calificó de "hito" que, a su juicio, "nos va a situar en un lugar importante en un mercado cada día más global y que exige que seamos más competitivos. Las grandes potencias económicas ya tienen la industria 4.0 y Andalucía tiene que incorporarse con fortaleza, porque en el horizonte habrá demanda, capacidad de negocio, pero hay que estar preparados porque ese mercado no va a llegar a todos y serán las empresas más competitivas, los territorios mejor adaptados, que mejor inviertan en tecnología y que garanticen además que esa transferencia de resultados se haga a más velocidad,  las que se quedarán con un porcentaje mayor de la tarta de ese negocio". Susana Díaz avanzó además que el CFA estará abierto a otros sectores. 

 

Por el momento, no van a esperar a que el centro esté construido y, desde ya, comenzarán a trabajar en un edificio ya construido en la Bahía de Cádiz.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios