No sólo de atún vive Zahara. También lo hace de la carne de retinto y, para rizar el rizo, de carreras de caballos en la playa. Todo eso unido provoca un cóctel idílico que ha permitido que este enclave barbateño se llene este fin de semana hasta la bandera.

Según explica Agustín Viqueira, gerente de Atlanterra Inmobiliaria, promotora del Gran Premio Atlanterra, este acontecimiento hípico, que hoy llega a la final de su quinta edición, surgió como complemento a la Ruta del Retinto de Zahara de los Atunes y para poder conmemorar el 50 aniversario de este complejo inmobiliario, nacido en marzo de 1962 y que ya da nombre a un destino turístico y residencial de la provincia de Cádiz.

El paso de los años lo ha ido consolidando y se define ya como el nuevo acontecimiento hípico al sur de Europa. Y es que durante tres días se dan cita en este pequeño núcleo jandeño polistas de varias nacionalidades, de medio y bajo hándicap, que luchan desde el pasado viernes por la noche por lograr el mejor trofeo para su equipo.

Así, Inglaterra, Nueva Zelanda, Escocia, Argentina, Uruguay y España son los países que representan los polistas que defienden a los equipos de polo que se disputan esta quinta edición del Gran Premio Atlanterra de Polo & Derby, que tiene como pista la propia arena de la playa del Carmen, con la muralla del Palacio de Pilas como símbolo de la importancia que siglos atrás ya tuvo la pesca de la almadraba en esta zona.

Durante la jornada de ayer sábado se desarrollaron tres sesiones repartidas entre la mañana, la tarde y la noche. De forma complementaria se celebró una gimkana, una carrera de cintas a caballo y las distintas carreras de caballos en la playa entre las 16:30 a 19:30 horas, con el sol cayendo sobre el Atlántico y dejando ver la silueta de los acantilados del Parque Natural de la Breña y al fondo el tómbolo de Trafalgar y su faro.

Un espectáculo inédito, y casi comparable con las carreras que en el mes de agosto se disputan en Sanlúcar aprovechando la bajamar. Así, tienen lugar tres carreras de profesionales y dos carreras populares. La velada se cerraría con la disputa del segundo partido de polo nocturno a las 00:00 horas.

Agustín Viqueira, impulsor de este evento hípico, apuntó que "evidentemente nunca podremos compararnos con las carreras de Sanlúcar, y la cantidad de años de ventaja que nos llevan y el sabor que tienen. Lo nuestro es un intento de organizar un evento que tiene un entorno natural precioso, que tiene una playa muy bonita, y que tiene unos atardeceres en la fecha en la que se celebra que son realmente impactantes". En este sentido, el gerente de Atlanterra Inmobiliaria destacó la alta participación de este año, con la disputa de carreras populares y profesionales, lo que atrae cada año a mayor cantidad de público "porque realmente se convierte en un espectáculo; es a la caída de la tarde, cuando la marea está vacía, y tener a los caballos corriendo con el océano Atlántico detrás, es un espectáculo envidiable".

Este evento, paralelo a la séptima edición de la Ruta del Retinto, vivie hoy su colofon a partir de las 11:00 horas con la final de polo y la entrega de los distintos premios en el recinto de la muralla del Palacio de Pilas.

En este mismo recinto se premiará a la receta que más ha gustado de las 34 que participan en la ruta gastronómica del retinto, donde se pretenden superar las 77.242 tapas puestas a la venta el pasado año, según los datos aportados por el presidente de la Asociación de Comerciantes de Zahara de los Atunes (Acoza), Gaspar Castro. Se trata de una iniciativa que junto con la Ruta del Atún pretende alargar la temporada estival, algo que para el presidente de la Junta Vecinal, Agustín Conejo, "ya se ha conseguido".

En la carpa instalada en el Palacio de Pilas, una agrupación musical amenizará la tarde de hoy hasta el comienzo de la entrega de los premios a la mejor tapa del retinto y al mejor camarero, así como el sorteo de los premios entre los asistentes que han participado en esta séptima ruta, que ayer dejaba imágenes de terrazas, barras y salones de bares y restaurante llenos de clientes.