A las dos de la tarde de ayer finalizaba el plazo de recepción de ofertas en la sede de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) para la explotación turística del Faro de Trafalgar de Barbate. Finalmente, a las dos y cuarto de la tarde de ayer, cinco eran las empresas que habían presentado sus ofertas y sus planes de explotación y gestión de la infraestructura portuaria que, en breve, podría pasar a convertirse en un hotel y centro de interpretación histórica de la Batalla de Trafalgar.

Y si al barbateño parece que le han salido varios 'novios', la Casa del Farero de Sancti Petri, sacada también a concurso con la misma finalidad por parte de la APBC, se ha quedado, de momento, soltera. En esta caso, el plazo para la presentación de ofertas finalizó el mes pasado y nadie se interesó por su explotación turística. Esta situación posibilitará que la APBC la pueda otorgar directamente sin que sea necesario que medie un nuevo concurso.

Ayer se recibieron las cinco ofertas que ahora deberán ser estudiadas por la Autoridad Portuaria, además de por el Ayuntamiento de Barbate, que ha sido uno de los impulsores de esta idea que podría atraer hasta la provincia un buen número de turistas interesados en este tipo de ambientaciones.

Sin embargo, cabe recordar que Ecologistas en Acción se opone al uso hotelero del "emblemático" faro de Trafalgar, al tiempo que propone "que siga perteneciendo" al Dominio Público Marítimo Terrestre (DPMT) y que "se considere un bien histórico y natural". Asimismo, defiende su "uso cultural y museístico". La confederación ecologista critica que "una vez más, lo que se ha hecho con dinero público y es de todos se pone a disposición de particulares para su lucro privado".

En el caso del Faro de Trafalgar, acogido al programa del Ministerio de Fomento llamado Faros de España, la superficie a ocupar son 3.050 metros cuadrados y la concesión podría otorgarse a 30 años, prorrogable durante otros diez más. En cuanto a la Casa del Farero del Poblado de Sancti Petri, la APBC plantea un Centro de Interpretación y Hostelería, aunque cabría la posibilidad de hostelería si fuera del interés del licitador. En este caso serían 433 metros y se plantea una concesión por diez años prorrogables por 3 años más.