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Provincia de Cádiz

Dos personas afectadas y 15 desalojadas por el incendio de una vivienda en Arcos

  • Una madre y su hijo de siete años fueron trasladados al hospital tras inhalar humo por el incendio que se desató en su casa

Una mujer y su hijo de siete años resultaron afectados por inhalación de humo y otras 15 personas fueron desalojadas de sus viviendas a última hora del martes tras el incendio que se desató en una vivienda de la calle Camino de las Nieves, número 36, en Arcos. La madre, propietaria de la casa incendiada, y el menor tuvieron que ser trasladados al hospital de Jerez, donde fueron atendidos por inhalación de humo, dándoles el alto unas horas después.

Por su parte, las familias de las otras siete viviendas desalojadas del mismo bloque, que no sufrieron el impacto de las llamas, pasaron la madrugada de ayer en domicilios de familiares o amigos, excepto tres personas que fueron ubicadas en un alojamiento dispuesto por el Ayuntamiento. Todos ellos volvieron ya por la mañana a sus casas, excepto la familia propietaria de la casa donde se originó el fuego por quedar prácticamente calcinadas algunas estancias como el salón. Todo apunta, según la versión de la propia dueña del inmueble, a que el origen del fuego se encuentre en un brasero.

El incendio se desató sobre las once y media de la noche del martes, en el salón de la vivienda, inundando de humo toda la casa. La mujer se encontraba, en ese momento, en una de las habitaciones, disponiéndose a acostar a su hijo cuando se vieron sorprendidos por el humo, pudiendo salir a un patio interior, desde donde la mujer pidió ayuda, llamando con su propio teléfono al 112. A esa hora, un vecino dio, también, la voz de alarma, personándose agentes de la Policía Local, que pudieron rescatar a la madre e hijo del interior de la vivienda y sacarlos a la calle. Peor suerte corrió la perra de la familia, que murió en el incendio. "Estuvimos en el patio un rato y veía la cocina cada vez más llena de humo. Me dije que no podríamos salir si esperaba más tiempo. Así que cogí al niño, tragando mucho humo y sin ver nada, volvimos al interior y un policía nos sacó al exterior", contaba ayer Maite, a este diario.

El alcalde de la localidad, José Luis Núñez, se personó tanto durante la noche del siniestro como ayer de mañana para conocer sus efectos y poner a disposición de los afectados la ayuda municipal. En este sentido, el arquitecto municipal se desplazó, también, hasta la zona para certificar, junto con los bomberos, que la estructura de la casa incendiada no estaba afectada, con lo que los vecinos podían volver a sus domicilios.

Los bomberos del parque de Arcos, que pertenecen al Consorcio Provincial, controlaron y extinguieron el fuego de la vivienda ubicada en un edificio de tres plantas. Para completar la extinción fueron necesarios 1.000 litros de agua.

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