La multinacional Carbures, especializada en fabricación de estructuras de fibra de carbono, se prepara para atender notables incrementos de demanda de construcción de aviones, para lo que ha adquirido una nueva tecnología que multiplicará por diez la velocidad del recanteo de sus piezas. 

En una nota de prensa, Carbures explica que con la adquisición de esta nueva tecnología pretender atender las previsiones de demanda del sector aeronáutico, que este año aportará a la firma, nacida en Cádiz, unos ingresos de 35,5 millones de euros, lo que supone el 30 por ciento del total de facturación prevista para el ejercicio actual (118,5 millones de euros) 

La nueva tecnología, instalada en la planta de Jerez de la frontera, la mayor del grupo en aeronáutica, se denominada BR25 y ha sido diseñada por la compañía EPMM, especialmente para el mecanizado de piezas de fibra de carbono. 

Se trata de un centro de mecanizado que permite multiplicar por diez la cadencia industrial en la fase final del proceso de fabricación, que consiste en el corte y recanteo de las piezas. 

Según Carbures las previsiones de fabricación del sector aeronáutico registran "unos incrementos notables" con gráficos cuyas flechas "apuntan al cielo". 

Así cita que uno de los gigantes del sector, Airbus prevé fabricar cerca de un centenar de su nuevo avión A-320 en 2016, y "la cifra se dispara hasta los 540 en 2018", explica Carbures en su nota de prensa. 

"Hemos puesto todo nuestro empeño en dar una cobertura completa a nuestros clientes y para ello adquirimos una tecnología punta en la fabricación de piezas de avión en fibra, que nos posiciona a la cabeza de esta industria en España, en los polos aeronáuticos sur y centro, y, probablemente, del europeo", señala el consejero Delegado del Grupo, José María Tarragó. 

La previsión de los ingresos de la empresa, que también trabaja para otros sectores como la obra civil o el automovilístico, apunta a que la aeronáutica aportará en 2017 unos 57 millones de euros a Carbures, un 35,4 por ciento del total de 161 millones de euros previstos. EFE