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Día de Andalucía

Ni pesimismo ni autocomplacencia

  • El periodista Antonio Hernández-Rodicio, en nombre de los galardonados con motivo del 28-F, reclama una provincia "alejada de tópicos dañinos pero leal a sus tradiciones".

El periodista Antonio Hernández-Rodicio, director de la Cadena Ser, reclamó ayer una provincia alejada de tópicos dañinos y leal a sus tradiciones, que mire al futuro sin olvidar su pasado y que desdeñe el pesimismo pero que huya de la autocomplacencia. Rodicio habló en el acto de entrega de las banderas de Andalucía en nombre de las diez personas y entidades de la provincia de Cádiz a las que este año ha premiado la Junta de Andalucía con motivo del 28-F. El tiempo actual es el del pulso a la adversidad, dijo el periodista gaditano. No fue la única referencia de la mañana a la crisis económica, al desempleo, a la difícil situación que atraviesa la provincia gaditana.  

Los diez premiados representan a quienes mejor afrontan estos tiempos inciertos. Son hombres y mujeres que “a diario trabajan por y para Cádiz y que desde sus responsabilidades públicas o privadas impulsan a esta provincia con el empeño de hacerla mejor, de hacerla crecer y de conseguir que Cádiz alcance las cotas de desarrollo que se merece”, dijo luego, al cerrar el acto, el vicepresidente de la Junta y consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios.

Previamente, ante los periodistas, Jiménez Barrios admitió que a la provincia gaditana, la crisis “le da fuerte y duro” y planteó que es un momento para llamar a la unidad. “Es mejor dejar atrás las cuitas partidarias y las discusiones estériles para unirnos y trabajar para resolver los estándares que desgraciadamente tiene en estos momentos la provincia de Cádiz”, comentó el consejero.

La entrega de los galardones se celebró en el salón de actos de la Casa de las Artes, en la capital gaditana. Abrió las intervenciones el delegado del Gobierno andaluz en Cádiz, Fernando López Gil, que dio la bienvenida y las gracias a los premiados. “ Son un grupo de gaditanos”, dijo, “que reflejan una Andalucía preparada, comprometida, valiente, que está en condiciones de mirar el futuro, pese a las dificultades actuales, con confianza”.

Uno a uno, los homenajeados fueron recogiendo después sus premios. Miguel Ángel Rodríguez, de Titania, se lo dedicó a los 43 trabajadores de esa empresa de El Puerto de base tecnológica y vinculada a la investigación.

El premio a la asociación de amigos Por una sonrisa lo recogió Eva Ledesma y se lo dedicó a su hijo, motor de ese grupo dedicado a llevar una sonrisa a los niños enfermos de cáncer. “Dicen que las personas que intentan mejorar su entorno son las que cambian el mundo”, dijo Ledesma, que mereció una gran ovación del público que llenaba el salón de actos.

El reconocimiento al club de golf La Cañada, de San Roque, lo recogió su presidente, José Chapaza. “El golf tiene que ser para todos y lo estamos consiguiendo”, dijo el representante del primer campo de golf público de España.

Manuel Barbadillo recibió el premio otorgado a Bodegas Barbadillo. La empresa, dijo, es mucho más que uno de los mejores vinos del mundo: es parte de la historia de Cádiz y de Andalucía y, como todo andaluz, con vocación universal.

En nombre de la Federación de Asociaciones de Mujeres de la Sierra de Cádiz acudió su presidenta, Mercedes Colunga, quien dedicó el galardón a todas las mujeres de la Sierra que están luchando para cambiar un entorno que las sitúa en un puesto desfavorable.

Thomas Couyotopoulo, director deportivo de la premiada escudería Racing Engineering, destacó que, en contra de lo que pueda parecer, sí se puede trabajar para ganar campeonatos desde una localidad como Sanlúcar.

El premio a Gestión Integrada de Áreas Litorales de la Universidad de Cádiz (UCA) lo recogió el responsable de ese grupo de investigación, Juan Manuel Barragán. Es un grupo, dijo, al que mueve su pasión por su trabajo y que pretende seguir asesorando a la Junta de Andalucía con una actitud libre e independiente.

La actriz gaditana (y jerezana) Ana Álvarez admitió al recoger su premio que no cree en los nacionalismos pero sí en las raíces, en los afectos. La mejor patria, dijo en esa línea, es la infancia. Ella la pasó en Jerez y fue muy buena, afirmó.

Otro actor premiado, Alex O’Dogherty, nacido en San Fernando, relató una anécdota que lo define. Un día, cuando era un niño, le espetó a su madre que de mayor quería ser un gran artista. Lo que yo quiero, le respondió ella, es que de mayor seas una gran persona, una buena persona. “Nunca he olvidado esas palabras de mi madre”, dijo el actor, que aportó otras notas a una jornada de frases de ánimo y superación:que sólo compite contra sí mismo, que sigue queriendo hacer mejor su trabajo y que el límite no existe.

Antonio Hernández-Rodicio recogió su premio, el reconocimiento especial de este año, y se encargó de agradecer los galardones en nombre de todos y también de destacar los valores de cada uno de ellos.

“Todos los que hoy somos reconocidos expresamos nuestra confianza en un futuro próspero para esta provincia”, dijo. “La queremos y la creemos alejada de tópicos dañinos pero leal a sus tradiciones; que mire al futuro sin olvidar su pasado; que asuma retos mayores sin olvidarse de la importancia del día a día; que desdeñe el pesimismo pero huya de la autocomplacencia. Que sea una tierra de encuentro, de futuro compartido, de buena vecindad. Una provincia sin fronteras ni sandeces como alambradas, que saque partido a su cultura, a su privilegiado entorno natural y a lo más importante: a sus gentes desde el Estrecho a la Sierra del Boyar; desde la Punta del Nao a Zaframagón”.

“Queremos ser parte de una tierra que enfila su futuro con confianza, llevando en una mano la semilla del progreso y en la otra la de la solidaridad, la igualdad y el ser justos y benéficos del 1812. Hoy nos sentimos honrados como hijos de esta provincia. En el honor que nos hacen crece nuestro compromiso, como escribió Alberti, por encima del mar, desde la orilla americana del Atlántico”.

Rodicio resaltó la “generosidad” de quienes le han concedido el galardón: “Es un lujo y un honor poder llevar el nombre de Cádiz por bandera. Y si me permiten quienes han decidido otorgarme tal distinción quiero sacarlos de su error: ser militante gaditano, trabajar desde nuestra atalaya para ayudar a fijar una imagen real de esta provincia no merece premios sino lo contrario: deberíamos abonar una cuota mensual por disfrutar de ese privilegio”.

Jiménez Barrios remató las reflexiones sobre la provincia. “Cádiz es uno de los motores económicos y culturales de Andalucía,  pero tiene que ser un motor para sí mismo, un motor que genere empleo y oportunidades a mayor ritmo para poder salir de una crisis económica dura que se ha cebado con quienes menos tienen” 

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