La caída de la pluma de una grúa situada en el muelle número 2 de la Base Naval de Rota provocaba en la mañana del miércoles un incidente que originó daños materiales de escasa consideración a tres fragatas españolas atracadas junto al dique.

Los hechos sucedieron sobre las doce del mediodía cuando la grúa de una contrata de Marina Española se desequilibraba, al parecer por un fallo mecánico en su anclaje, que le hizo perder el equilibrio y causó que la pluma de la misma cayera encima de los buques españoles. A consecuencia de ello, la fragata Canarias sufrió desperfectos, justamente cuando se disponía a zarpar desde el muelle de la base militar roteña. Esos daños consistieron, según fuentes militares, en la rotura de uno de los candeleros y desperfectos en la pintura del buque.

Por fortuna, no hubo que lamentar daños personales, a excepción del enorme susto que se llevó el encargado de la grúa, quien fue atendido en el Hospital de la Base sin mayores consecuencias.

Otra consecuencia a destacar debido al desplome de la pluma fue el derrame de bidones de aceite que se encontraban apilados en unos palés en el muelle y que la pieza de la grúa reventó al caer sobre ellos. Fue Marina Española quien se encargó de subsanar las consecuencias de este incidente sin que fuera necesaria la presencia de los Bomberos de la Base que aún así, y como estipula el protocolo, se personó en la zona. Tras los trabajos de limpieza del aceite esparcido, la pluma caída era retirada en torno a las siete de la tarde.

Testigos presenciales relataron ayer a este periódico que la caída de la parte superior de la grúa originó un gran estruendo y que, afortunadamente, no alcanzó a nadie pese a la hora en que se produjo el percance y en la que había personal por la zona.

La grúa se dedica a labores de transporte de abastecimiento de víveres, materiales y equipos militares a los buques que se encuentran amarrados en el citado muelle de la Base Naval de Rota.

El incidente generó que se retrasara la salida de la fragata Canarias, ya que quedó inmovilizada durante algo más de siete horas para evaluar el alcance de los deterioros. Hace escasos días este buque de la Armada participó en los actos preparativos con motivo de la toma de posesión del nuevo almirante de la flota, que se celebró en aguas de la Bahía.