El recinto amurallado de La Segur y la parte trasera de la iglesia parroquial del Divino Salvador han servido de escenario para realizar, ante un nutrido grupo de vecinos, el primer sorteo infantil de Hazas de Suerte en el que participaban los niños de la localidad de entre 6 y 12 años, que previamente se habían inscrito y habían dado forma al Padrón que desde hace una semana se mantuvo expuesto en La Plazuela.

La mesa estaba presidida por el alcalde, José Ortiz, la teniente de alcalde de Cultura, Francisca Sánchez y el teniente de alcalde y concejal de Agricultura y Ganadería, Miguel Ángel Peña, además de varios menores que forman el Consejo de la Infancia. Las cobijadas Mayor y de Honor infantiles fueron las encargadas de girar el bombo de la suerte y sacar las bolas de los agraciados.

El sorteo se celebró con la misma solemnidad que el original que se celebra el 22 de diciembre de cada año bisiesto, con la introducción de las bolas en el bombo, para comprobación de todos de la honestidad del sorteo, e inmediatamente después comenzaron a conocerse el nombre de los agraciados. Un total de 58 niños que emocionados y nerviosos recibían la noticia in situ de su suerte.

Todos los agraciados recibieron como premio un diploma acreditativo de la haza que simbólicamente le había correspondido, un estuche escolar obsequio de La Caixa y un anorak con el logo de las Hazas de Suerte y del sorteo infantil, como recuerdo de su participación en ese día que resultó tan especial para ellos.

Al finalizar el acto se disfrutó de recreaciones de pasajes históricos de Juan Relinque por diferentes rincones del casco histórico a cargo del grupo local Marimantas.

Esta actividad ha formado parte del programa desarrollado por el Ayuntamiento que busca lograr que el sorteo, así como el propio conjunto de las tierras comunales, cuyas rentas se sortean cada cuatro años, se consideren como Bien Inmaterial de la Humanidad por parte de la Unesco.