Tarde tensa la vivida ayer en la capital gaditana con los ex trabajadores de Delphi como protagonistas y que acabó con la denuncia por parte de la Policía de diez de los participantes en las protestas, al parecer, por manifestación ilegal. 

Alrededor de las cinco de la tarde, un grupo de unas cien personas se concentraba frente a la sede provincial del PSOE, en la plaza de San Antonio de la capital gaditana. Allí se esperaba la presencia de dirigentes socialistas que iban a participar en un acto por la tarde. Los ánimos cada vez más encendidos de los ex empleados llevaron a que la entrada de la sede sufriera diversos destrozos. Entre ellos, la rotura de un cristal de la puerta, además de pintadas. También hubo lanzamiento de huevos y pintadas en la sede local socialista en la calle Gaspar del Pino. 

El PSOE había pedido a la Subdelegación del Gobierno en Cádiz medidas de protección para la celebración en la tarde de ayer de un acto en el que estaba prevista la asistencia del consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía y presidente de la Ejecutiva Provincial del PSOE, Manuel Jiménez Barrios, que finalmente no acudió "por problemas de agenda". En el acto sí participó la secretaria provincial del PSOE de Cádiz, Irene García, y la candidata número tres del PSOE a las elecciones europeas, Soledad Cabezón, entre otros. 

Precisamente, fue la secretaria general de los socialistas gaditanos, Irene García, la que se llevó la peor parte. En su intento de acceder a la sede de San Antonio, los presentes profirieron todo tipo de insultos y le recriminaron la falta de soluciones para su situación. Topo pese a que García trató de decirle a los trabajadores que ya hay un acuerdo de los tres partidos (PP, PSOE e IU) para reunirse con ellos el próximo 2 de mayo, un encuentro que el colectivo había solicitado para pedir que se busque soluciones para los ex trabajadores de Delphi que siguen en paro. Tiempo después hicieron acto de presencia agentes de la Policía antidisturbios, viviéndose momentos de tensión entre policías y manifestantes.

De hecho, en un comunicado, la propia Irene García censuró los actos vandálicos y afirmó que "podemos entender su desesperación, como la de miles de parados de esta provincia, pero no vamos a tolerar actos vandálicos ni mucho menos violentos". Así, anunció que el PSOE de Cádiz tomará medidas e interpondrá denuncia sobre los desperfectos que han ocasionado tanto en la sede local como en la provincial.

Por su parte, la secretaria de Organización, Araceli Maese, tachó de "antidemocrática" la actitud del colectivo "que pretendía reventar en todo momento el acto y coartar nuestra libertad de expresión, pero no lo han conseguido". 

Pero, además, Maese lamentó que, pese a haber sido comunicado el acto a la Subdelegación del Gobierno, "el dispositivo policial desplegado no cumplía los requisitos mínimos para garantizar la seguridad de los asistentes" e, igualmente, censuró que el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, "no respondiera a las llamadas que se le han efectuado para informarle de la tensión que se estaba viviendo en esos momentos por falta de agentes".

 No quedó ahí la cosa. Al instante, los ex trabajadores de Delphi decidieron trasladarse a la Facultad de Económicas y Empresariales de la UCA (antiguo hospital de Mora), donde el coordinador regional de IU, Antonio Maíllo, iba a participar en una charla-coloquio sobre 'Derechos y Libertades en la UE' junto a Javier Couso, candidato a las elecciones europeas. Sin embargo, los manifestantes irrumpieron en el salón donde se iba a celebrar el acto, que tuvo que ser suspendido.

Incluso, agentes de la Policía Nacional tuvieron que volver a intervenir dentro del salón de conferencias ya que algunos de los participantes en la protesta profirieron insultos a los dirigentes de IU. Pese a los intentos por intentar hablar con Maíllo, finalmente no se produjo el encuentro que sí aceptó el coordinador provincial de IU y delegado territorial de Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio de la Junta, Manuel Cárdenas, que intentó calmar la situación. En la suspensión del acto pudo haber influido el hecho de que Couso tuviera que viajar hacia Madrid en la misma tarde-noche de ayer, algo que imposibilitaba su participación en la charla-coloquio si su comienzo se demoraba en exceso.

El portavoz de USO en el conflicto abierto tras el cierre de Delphi, Miguel Paramio, explicó que el próximo 2 de mayo, IU, PSOE y PP celebrarán la reunión a tres bandas a la que se comprometieron para tratar de buscar una solución al conflicto del colectivo de extrabajadores de Delphi pero, no obstante, indicó que esa reunión "no va a contentar al colectivo, porque lo que quieren los trabajadores es una propuesta conjunta". 

"Los integrantes del colectivo de extrabajadores de Delphi ya no pueden esperar más y no van a despegar el pie del acelerador en sus protestas", dijo, al tiempo que aseguró que "hasta que no haya algo consistente sobre la mesa" el colectivo de extrabajadores de Delphi "no va a parar".

Fue al final de las protestas cuando, según los sindicatos, cuatro participantes fueron detenidos por la Policía Nacional y conducidos a Comisaría, aunque quedaron en libertad en la misma tarde de ayer. A otros seis se les pidió su identificación frente a la sede del PSOE.