Provincia de Cádiz

La asamblea de Roche acaba un año más en el cuartelillo de la Guardia Civil

  • La Benemérita y la Policía Local de Conil median en una reunión que acaba con una treintena de denuncias contra el presidente

Por segundo año consecutivo la asamblea de propietarios de la urbanización Roche, en Conil, terminó como el rosario de la aurora. En este caso, la reunión anual de vecinos, que tuvo lugar el pasado sábado, no deparó denuncias por supuestas agresiones ante la Guardia Civil, como sí sucedió hace ahora 12 meses. Pero durante las jornadas del sábado y de ayer ya se ha contabilizado una treintena de denuncias contra el presidente de la comunidad, José Ramón Marina, a quienes algunos propietarios, a título particular, acusan de coacciones y abuso de poder.

No es normal que agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local se vean obligados a intervenir para intentar apaciguar los ánimos en una asamblea de propietarios. Pero eso fue exactamente lo que sucedió el sábado en Roche, donde durante dos horas un nutrido grupo de vecinos se negaron a entrar en la sala donde se celebraba la asamblea al estar en desacuerdo con las normas impuestas por el presidente para poder acceder al edificio social. Por primera vez ya no valía con presentar el DNI para entrar en la asamblea porque se dispusieron filtros más exigentes. Ante esta situación, dos vigilantes de seguridad contratados por la junta directiva impedían el acceso de numerosos propietarios.

Tuvieron que pasar dos horas para que, tras la mediación de la Guardia Civil, la situación se normalizase y pudiera continuar una asamblea que concluyó, de nuevo, con la reelección de Marina como presidente, al no presentarse al final candidatura alternativa.

Sus opositores, sin embargo, anunciaban ayer que volverán a impugnar el resultado de esta asamblea, acusando al presidente de imponer unas normas asumiendo unas competencias que no le corresponden y que, añaden, podrían vulnerar la legalidad. Estos opositores a Marina ya impugnaron la asamblea del año pasado, aunque la Justicia no se ha pronunciado aún sobre ello.

Desde la junta directiva, por el contrario, se defendía ayer la legalidad de las medidas adoptadas en la asamblea y se acusó a la parte derrotada de no saber perder.

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