Como un jarro de agua fría ha sentado al Ayuntamiento isleño que la Junta de Andalucía haya incluido a dos zonas claves para su desarrollo en el plan de Protección del Corredor Litoral: Camposoto y los polvorines de Fadricas y Punta Cantera.

"Ha sido un proyectil en la línea de flotación del desarrollo de San Fernando", afirmó el alcalde y presidente de la Diputación Provincial de Cádiz, José Loaiza. El regidor -y los populares- acusaron a la Administración andaluza de bloquear de un zarpazo cualquier posible tentativa de desarrollo de San Fernando.

"En un primer momento se nos dijo que San Fernando no iba a entrar en el decreto y al final sí estamos", lamentó el regidor, que anunció que el Ayuntamiento presentará alegaciones al decreto.

Los suelos de Camposoto, aún con un uso militar activo, constituyen la gran esperanza de La Isla para afrontar su ansiado desarrollo turístico. O, dicho de otra forma, el despegue económico que añora desde hace más de una década (acaban de cumplirse once años del protocolo suscrito con Defensa para la recuperación del suelo militar).

Y el desarrollo de los polvorines de Fadricas, tras un intrincado proceso y una larga batalla legal, ha sido recientemente desbloqueado con la adhesión del Ministerio de Defensa al convenio propuesto por el Ayuntamiento. Se espera su desarrollo a medio plazo, pero el plan de Protección del Corredor Litoral podría echar por tierra todo el desarrollo previsto.

Por su parte, la portavoz del PSOE isleño, Patricia Cavada, aseguró ayer que no había motivos de preocupación y afirmó que La Isla entraría dentro de las excepciones contempladas por la norma al estar cerca del núcleo urbano y constituir las únicas bolsas de suelo disponibles.