Un conductor ebrio -que superó los 0,80 en el control de alcoholemia- provocó ayer la muerte de dos menores de edad, un chico de 17 años y su acompañante, una chica de 15, que volvían de El Puerto por la carretera de El Portal. Ambos circulaban con su ciclomotor de tipo scooter por una curva con buena visibilidad que se ubica en la cuesta que conduce a la Sierra de San Cristóbal, prácticamente al lado del antiguo 'Rancho de la Bola'. El accidente tuvo lugar a las 17,25 horas de la tarde, en el kilómetro 4,8 de la carretera A-2002, cuando los menores, al parecer vecinos de las populares barriadas jerezanas de San Telmo y Federico Mayo, circulaban correctamente por su carril en dirección a Jerez procedentes de El Puerto. El turismo, un coche de la marca Volkswagen, circulaba tras una furgoneta de reparto en dirección opuesta, es decir, hacia el cruce del Casino Bahía de Cádiz. En un momento dado, el turismo procedió a adelantar a la furgoneta a pesar de que existe una línea continua que impide tal maniobra. El choque, de carácter frontal, tuvo efectos devastadores para los ocupantes del ciclomotor, que fallecieron en el acto. El turismo se llevó el golpe en la zona del copiloto. Los efectos del choque fueron enormes, pues el cristal acabó completamente destrozado, no menos que el parachoques de dicha zona del vehículo. Según pudo comprobar este medio, la moto acabó desintegrada y esparcida en un radio superior al centenar de metros. Personal de la funeraria Servisa se hizo cargo de los cuerpos, que fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal.

El dispositivo policial fue enorme pues en la zona se dieron cita desde agentes de la Guardia Civil de Tráfico (que se hicieron cargo del atestado, de tomar declaraciones a los testigos y de realizar la prueba de alcoholemia al conductor del turismo, que fue positiva) así como policías locales de Jerez y hasta de la vecina localidad de El Puerto. Lo primero que hicieron los agentes fue despejar una zona que sirviera de zona de aterrizaje para el helicóptero de la empresa pública de emergencias 061.

Desgraciadamente no se hubo de realizar traslado a centro hospitalario alguno pues las muertes fueron certificadas de inmediato. Los agentes tomaron declaración al conductor de la furgoneta de reparto, el cual señaló, según pudo saber este periódico, que no vio el impacto pero sí que escuchó el mismo y acto seguido vio al ciclomotor volar en dirección contraria a la que llevaba tras haber pasado ante él apenas unos segundos antes.

El conductor del turismo fue detenido por la Guardia Civil acusado de un presunto delito de homicidio imprudente bajo los efectos del alcohol.