La segunda y última jornada grande de embarque rociero en Bajo de Guía fue un nuboso día de frío e incluso lluvias que no impidió que se concentrara en esta playa de Sanlúcar numeroso público, como es tradicional año tras año. No en vano, estaba programado el paso por el río Guadalquivir de las hermandades de la provincia con mayor número de peregrinos.

Para los devotos sanluqueños y chipioneros la de ayer fue, además, una jornada muy especial. De hecho, lógicamente emocionados, la hermana mayor de la corporación de Sanlúcar, Pepi Pérez, y el máximo responsable de la hermandad de Chipiona, Antonio Lázaro, coincidieron en calificar de "histórico" este día. Los rocieros de ambas poblaciones vecinas lo compartieron juntos desde primera hora de la mañana a modo de sentida despedida con motivo del reciente nombramiento de la hermandad de Chipiona como filial de la Matriz de Almonte. Y es que a partir de la próxima romería los peregrinos chipioneros harán su propio camino hacia El Rocío, dejando para su particular historia muchos años de vivencias comunes con los devotos sanluqueños.

La tradicional misa de romeros en pleno centro de Sanlúcar estuvo presidida por el obispo de Asidonia-Jerez, José Mazuelos, y, a continuación, sendas hermandades recorrieron juntas con sus respectivos simpecados el itinerario que suelen realizan los rocieros sanluqueños por su ciudad antes de entrar en Bajo de Guía. Este barrio estaba abarrotado de público al pie de la Capilla de Nuestra Señora del Carmen, cuya visita anuncia el embarque de cada hermandad. Estos episodios rocieros sin precedentes tuvieron su culminación en la playa sanluqueña cuando se produjo el embarque de ambos simpecados en una misma barcaza para cruzar el Guadalquivir en dirección a la orilla onubense.

Las hermandades de Sanlúcar y Chipiona necesitaron toda la mañana y buena parte de la tarde para atravesar el río, dejando luego paso a los peregrinos de El Puerto y Jerez, que en cada romería son los que cierran las dos jornadas oficiales de embarque en Bajo de Guía. A diferencia de lo que ocurrió el martes, ayer no se registraron retrasos considerables en el tránsito de las hermandades. Los últimos grupos numerosos de romeros utilizaron las conocidas barcazas dispuestas para la ocasión pasadas las siete y media de la tarde.

Durante toda la jornada el tiempo se mantuvo desapacible, con frío, nubes e incluso lluvias, aunque bien es cierto que éstas fueron escasas. Las frescas temperaturas registradas, nada habituales en este tramo del camino rociero de las hermandades gaditanas, obligaron a los romeros y al público a echar mano de alguna que otra ropa de abrigo tanto por la mañana como por la tarde. En todo caso, ya lo venían apuntando las previsiones meteorológicas desde hacía varios días, de manera que no cogió por sorpresa a casi nadie. Hasta ahora, el fuerte calor solía marcar las jornadas de embarque en Sanlúcar, pero, al menos, en esta romería el Sol dejó pasar la ocasión.

En el capítulo de intervenciones sanitarias, el dispositivo del Plan Romero establecido en Bajo de Guía apuntó como única actuación reseñable el traslado de un caballista de la hermandad de Sanlúcar que resultó herido leve tras sufrir una caída al Hospital Comarcal 'Virgen del Camino', situado en esta misma ciudad.

El delegado del Gobierno andaluz en Cádiz, Fernando López Gil, volvió a visitar ayer la zona de embarque junto a la alcaldesa sanluqueña, Irene García. A mediodía, realizaron un balance positivo del desarrollo de ambas jornadas. "Algunos técnicos del dispositivo nos han dicho incluso que están un poco aburridos, un dato que es el mejor indicativo de que todo transcurre con normalidad y de que no ha ocurrido nada relevante", comentó López Gil, que, al igual que la regidora, acompañó a la hermandad de Sanlúcar en el recorrido previo al embarque.

También visitó ayer Bajo de Guía el subdelegado del Gobierno central en la provincia, Javier de Torre, que subrayó, asimismo, "la tranquilidad con la que se está desarrollando el embarque y la coordinación existente entre los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, la Policía Local y Protección Civil". De Torre destacó, igualmente, la "buena colaboración y coordinación que hay" entre las distintas administraciones. En este sentido, agradeció públicamente a la Junta de Andalucía el trabajo del dispositivo que le compete.