Pasan los años. Ya son 17 los que hace que falleció, pero Lady Di sigue siendo noticia. Su vida terminó al más puro estilo del de una princesa de cuento. Media noche, París, el hotel Ritz, un Mercedes y la compañía de su amor. Todo muy idílico, pero la mala fortuna hizo que Diana y Dodi Al-Fayed sufrieran un accidente de tráfico en el Puente del Alma de la capital francesa mientras eran perseguidos por los fotógrafos. Comenzó entonces el mito. Un mito que en ocasiones ha bajado del pedestal porque ha habido quien ha intentado que así fuese. Tanto en vida como después de su fallecimiento Diana de Gales siempre ha estado rodeada de polémica. La última surgió hace dos semanas cuando Dickie Arbiter, que trabajó como secretario de prensa del Palacio de Buckingham justo después de la muerte de la princesa, anunció que iba a publicar un libro centrado en la vida de la que fuera mujer del príncipe Carlos, algo que enfadó mucho a la Casa Real británica.

A lo largo de estos 17 años han sido numerosas las ocasiones en las que la familia Windsor ha visto tocada su tranquilidad por alusiones a la que fuera princesa del pueblo. La paternidad del príncipe Enrique o las causas del accidente que le llevó a la muerte han sido algunas de las especulaciones que más han sonado durante este tiempo. A finales de 2013, cuando se estrenó la película Diana, protagonizada por Naomi Watts. Después de las malas críticas que tuvo la cinta y el rechazo por parte de la reina Isabel II hasta la actriz dijo que se sentía arrepentida por haber interpretado ese papel. La veracidad de lo que relata la película es bastante dudosa y presentar la historia de amor entre la princesa de Gales y el doctor Hasnat Khan como la más importante de su vida no hizo más que aumentar los comentarios negativos.

Pese a estas controversias la que fuera mujer del hijo de la reina Isabel II sigue siendo una de las princesas más queridas de las monarquías europeas. Son muchos los británicos que le echan de menos y ven en ella un ejemplo a seguir. Por eso Catalina de Inglaterra siempre intenta seguir el estilo y saber estar de su suegra. Su marido el príncipe Guillermo siempre ha tenido muy presente a su madre y desde que eligió a Kate Middleton como la mujer con la que quería pasar el resto de su vida le ha enseñado todo lo que a él le inculcó Diana. Las comparaciones entre ambas son constantes pero casi nunca sale perdiendo ninguna. Ambas son aclamadas tanto por su comportamiento como por su vestuario. Los duques de Cambridge quieren que su hijo el príncipe Jorge, que en julio cumplió un año, se sienta lo más cerca posible de su abuela. Por eso en septiembre del año pasado le llevaron a visitar su tumba. El hijo pequeño de Diana y Carlos de Inglaterra, Enrique, también echa mucho de menos a su madre. Tenía nueve años cuando se murió y desde entonces se ha visto envuelto en muchos líos. Líos en los que si la buena de Diana hubiera estado quizás podría haber evitado.