Pasarela

El talento, la sensibilidad y la pasión en los fogones

  • La chef del restaurante brasileño Maní trabajó como modelo para pagarse la carrera de cocina y se formó en Gerona con los hermanos Roca

Las cocinas de los mejores restaurantes del mundo siguen están en su mayoría dominadas por hombres. Poco a poco las mujeres se van haciendo hueco en un sector y para reconocer la labor de las jefas de cocina la revista Restaurant, encargada de nombrar los mejores restaurantes del mundo, otorga un premio especial a la mejor chef femenina. Este año la galardonada fue la brasileña Helena Rizzo. Su pasión siempre ha sido la cocina, aunque es un sector tan complicado que primero intentó formarse como arquitecta, pero lo dejó para dedicarse a su verdadera vocación. Para costearse sus estudios de cocina tuvo que trabajar como modelo. A sus 36 años, tras un duro camino, ha llegado a lo más alto de los fogones. Desde 2006 es jefa de cocina del restaurante Maní, en Brasil, propiedad de ella y de su marido, el chef español Daniel Redondo.

Antes de abrir su exitoso restaurante trabajó con grandes profesionales de la cocina como Emmanuel Bassoleil, Luciano Boseggia y Neka Barreto. Junto a dos socios abrió Na Mata Café, donde fue jefa de cocina durante dos años. Allí era feliz pero necesitaba crecer profesionalmente. Por eso se trasladó a Italia, donde trabajo en algunos restaurantes. La gastronomía española siempre le despertó mucha curiosidad y no quiso perder la oportunidad de viajar a nuestro país para aprender junto a los mejores. Aquí trabajó en ocho restaurantes diferentes. El más conocido es El Celler de Can Roca. Debido a su potencial Joan, uno de los hermanos Roca, le propuso liderar la cocina del prestigioso hotel Omm, donde estuvo un año. "Helena tiene talento, sensibilidad y pasión. Ella es auténtica y fiel a sus raíces", aseguró el chef catalán. Tan fiel es al lugar que le vio nacer que en 2004 decidió hacer las maletas y volver a Brasil para probar suerte. Al año siguiente su marido viajó a Sao Paulo para estar con ella y en 2006 abrieron el restaurante Maní. Tiene capacidad para 70 comensales, ofrecen tanto carta rápida como menú degustación y el precio por comensal oscila entre los 45 y 80 euros. Desde que pusiesen en marcha su negocio los reconocimientos no han dejado de llegar. Su restaurante está entre los 50 mejores del mundo y en el puesto número 5 de los mejores de Latinoamérica. Después de varios premios este año le llegó el más importante. Helena fue la ganadora del premio Veuve Clicquot 2014 a la mejor chef del mundo. Un reconocimiento que le anima a seguir trabajando duro. La chef brasileña tiene previsto publicar en los próximos meses su primer libro de cocina y abrir su segundo restaurante.

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