EL movimiento Yedai, o Jedi, aparece a partir de la saga de La Guerra de las Galaxias, y se desarrolla con base en las enseñanzas de los Caballeros Yedai de las películas, en las que aparecía el Maestro Yoda, que siempre andaba por ahí haciendo el Yoda, es decir, yodando. Este movimiento ha crecido y en este momento tiene solicitado su reconocimiento como religión oficial en varios países. En el censo elaborado en el año 2001 en Inglaterra, un total de 390.127 personas declararon profesar la religión Yedai, superando el número de seguidores de religiones como el judaísmo o el budismo, y confirmándose como la cuarta religión del país. Con estos datos los Yedaistas ingleses pueden sentirse orgullosos (incluso como para celebrar el día del orgullo Yedai).

El Yedai cree que todo proviene de la Fuerza, que a su vez es la energía creada por todas las cosas, todo lo que nos rodea. Pero en todas las películas americanas tiene que haber un malo, a ser posible de otro color para distinguirlo bien. Así en las películas del oeste el malo era el piel-roja, en las de guerra los japoneses (piel-amarilla), y siempre el tema de los piel-negra en las películas sobre racismo. En esta ocasión, y aunque la fuerza fuera una energía, se la dotó de un lado oscuro (otro color) para crear la parte mala.

Cuando un niño no se quiere dormir, le cantan: "duérmete niño Yedai, duérmete ya, que viene Darth Veider y te vas a enterar". Este cambio es importante, porque un niño puede imaginarse que el coco se lo quiere comer, pero como a Darth Veider no se le ve la boca tras la máscara, es mejor dejar a la imaginación qué maldades pueda hacerle a un niño. Aprovechando esta época de comuniones, les indico que no existen tales en la religión Yedai, y que con una espada láser de plástico, los jóvenes Yedai son felices. Me parece bien cualquier movimiento o religión que predique que hay que ser buena gente. Como parece que es el caso, que sea bienvenida la religión Yedai. Que la Fuerza le acompañe.