Se va octubre, en verdad casi se ha ido ya. Sin noticias. Bueno, este regalo del agua, que asume el gobierno municipal de su bolsillo, dizque del nuestro. Muy agradecido. Un detalle. ¿Y ahora? Todo esto del agua, de la basura… ¡Todo lo desmunicipalizado me trae tantos recuerdos! Y siempre bajo la tutela de los andalucistas, que le pusieron nombres menos rotundos, como recogida de residuos sólidos urbanos, ¡ole! Lo último de lo último de hace pocas 'legislaturas' fue lo de desarrollo sostenible tracatrá. Han aprendido casi todos que la primera batalla a ganar siempre es la del lenguaje. Pero sin noticias, ya decía. De la subestación eléctrica del Janer. ¿Parece increíble, verdad? No, no lo parece: lo es. Digo un equipamiento fundamental para que el tranvía de nuestras pesadillas pueda llegar a Cádiz por la vía del tren y ni han empezado las obras. Año y medio de retraso, cuando menos. Los diez años serán más años. Y parece casi cantado ya que el tranvía va a venir de tu casita a la mía. O sea, de Pelagatos a la Mojosa, como llaman con cierta crueldad cañaílla al monumento de Tusquets que puso Antonio Moreno en la Ardila. ¿A Cádiz no? Quiero pensar que sí pero Adif no ha dado el visto bueno al tránsito por no sé qué problemas. Susana Díaz debería mandar parar, o sea, lo contrario. Darle instrucciones claras a López Gil, gran experto en el ralentí. O a quienes sean que sean. Porque ya rebosa el vaso de la paciencia de San Fernando más que de ningún otro. Que ha aguantado el sufrimiento de la calle Real años y años sin contrapartidas. Poniéndole además armatostes que hacen de pantallas bastas que impiden la visión del caserío. Y el rosario interminable de arréglate y vuélvete a arreglar, las vallas acotando los desperfectos que se reproducían de nuevo.

Sin noticias y, me temo, es que no hay noticias porque si hubiera noticias, noticias medio buenas, serían ellos los primeros que pondrían el altavoz en marcha, y el plasma y el panfleto. Deberíamos establecer los ciudadanos todo lo parado o todo lo que se vaya moviendo. Y hacerle el seguimiento. Como el histórico de la Bolsa de valores. Los picos y las caídas, digo. Como esto del agua, que nos ahorran seis euros más por familia para un gasto nuevo, creo. Ya casi todos pagamos y vamos para otro sitio, de mi corazón a mis asuntos, como dejó escrito Miguel Hernández. Sin noticias, o cortito de noticias. Digo yo que estarán preparando un alud para el segundo año y los que restan serán de verdadero frenesí de hacer cosas para la mayoría absoluta. Dos años de locos. Quizás. Pero lo de ahora es esto del agua y algunos otros emblemas que recordar no quiero.