BUENO, pues ante el Tenerife llegó esa suerte de la que tanto hablaba Álvaro Cervera. No digo que el Cádiz no buscara el triunfo, porque estuvo a punto incluso de ganar en los minutos finales, pero el gol apareció cuando peor pintaban las cosas, con uno menos y el partido casi listo. Punto de oro, pero un tampoco nos resuelve gran cosa. De lo que sí estoy seguro es de que el punto ha servido para congelar las dudas que pudiera haber con el entrenador. Una derrota hubiera sido mortal de necesidad para Cervera. Incluso con el punto de Tenerife creo que se la va a jugar hoy ante el UCAM. El equipo necesita puntos y la ley del fútbol es implacable. Y cinco jornadas seguidas sin ganar sería un lastre demasiado pesado. Y el principal problema que veo es que en las últimas semanas nos estamos enfrentando a equipos que están igualados con el Cádiz en la tabla. Oviedo, Rayo, Tenerife y ahora el UCAM, han estado de mitad de tabla para abajo cuando se han enfrentado a nosotros. Y no hemos sido capaces de ganarles a los tres primeros. Veremos hoy con el cuarto. La conclusión que se saca de todo ello, aunque evidentemente el fútbol no hay quien lo entienda, es que estamos teniendo problemas para ganar a los de abajo, que dios nos coneja confesados cuando tengamos que jugar con los de arriba, con los que están fuertes, que para colmo no es nutra liga. Estoy de acuerdo con Álvaro Cervera cuando dice que el equipo ha hecho méritos para estar más arriba. Este Cádiz tendría que tener hoy como mínimo cinco puntos más: los del gol anulado en Almería y los tres que nos robaron ante el Mirandés. Y claro, con 16 puntos la vida se vería de otra manera. Estaríamos cuartos y en zona de promoción. Pero por desgracia en el fútbol solo valen los puntos que tienes, no los que deberías tener. Así que no puedo compartir la opinión de Cervera de que no cambiaría nada del juego del Cádiz. Cuando llevas tres jornadas sumando solo un punto de nueve y sobre la bocina es tiempo de cambiar cosas. Lo que haya que hacer se lo dejo a Cervera, que no ni quiero ni pretendo jugar a entrenador. Pero hay que cambiar cosas si queremos salir de ahí abajo.

Y nuestro rival de hoy nos llega en similares condiciones a las nuestras. Cuatro jornadas seguidas sin ganar es mucha tela para ambas escuadras. Evidentemente no es un partido a vida o muerte, pero no me gusta eso de que vayan pasando las jornadas y sigamos diciendo que todavía queda mucha liga porque, aunque es verdad, cada día quede menos liga.

Y hoy para colmo nos falta nuestro máximo goleador, Ortuño. En otras circunstancias no sería preocupante, pero en el Cádiz no abundan los jugadores anotadores. Nos queda la esperanza de que Gorka Santamaría s siga dando esperanzas o ver a un Dani Güiza un pelín mejor de forma física. En definitiva, un duelo no decisivo pero donde no se puede fallar. Lo de "No hay quinto malo" vale para los toros, no para los resultados de fútbol. Hoy hay que ganar. Sin más. No cabe otra.