El pinsapar

ENRIQUE / MONTIEL

El Código Susana

MUY agradecido, hoy o mañana señora presidente en funciones. Su mensaje más repetido ayer fue que habláramos los andaluces y las andaluzas. Hablaremos. El domingo 22 de marzo, Domingo de Pasión, creo. ¿Podremos decir que el hecho de que guarde como aforados a los diputados investigados por la juez Alaya nos parece mal y que no entendemos que adelanta usted un año las elecciones porque sus socios no han sido leales? Si elaboramos el catálogo de las preguntas que ni siquiera ha formulado sería el código con el que nos entenderíamos, su Código. Y cuya respuesta no sería otra que votarla a usted o votar a otro partido y/o candidato. Que dependiendo quien fuera se podría calibrar la respuesta de la gente -los andaluces, las andaluzas. Es decir, si hablamos del tiempo de la gente y si abrumadoramente sale usted elegida, ¿abrumadoramente le hemos dicho que hizo usted muy requetebién guardando en el aforamiento a los investigados por la temible Alaya y mandando a sus casas a los socios de Izquierda Unida, por desleales? Lo serían, de acuerdo con dicho Código, qué duda cabe. Y lo contrario también, como bien sabe usted. Muchas gracias, señora presidente, de cualquier modo; nos ha dado la oportunidad anticipada de decirle anticipadamente lo que nos parece, no se lamente luego, si llega el caso. O laméntese porque ya dará igual.

Esto va entre batiburrillo y bucle, no melancólico por cierto. Me temo y me perdonen. Batiburrillo porque es verdad que existe ese Código de Susana Díaz, es la tentación de todos y Mas lo va a intentar imponer en las próximas catalanas, ya anunciadas pero con tiempo suficiente para ir sacándole punta al lápiz con el que escriba el desafuero. Es el código de elegir el momento desde el Poder para conquistar más Poder. Y bucle porque damos un rodeo para volver al punto de origen, que puede volver a ser una necesidad de nuevo pacto con Izquierda Unida porque la mayoría absoluta que le han "vendido" los nigromantes de San Telmo no ha llegado, sino todo lo contrario. Nueva negociación, nuevos intereses conjuntos y lo que dicen los mercantilistas: un buen negocio es siempre de más de una vez porque negocio de una vez no es negocio. Es como echar dinero bueno al dinero malo, agua al vino y así.

Pero reconozcámoslo, qué fiesta es el Domingo de la Urna, todos los domingos de urnas. En una papeleta se escriben el nombre de aquello que nos exaspera, nos entusiasma, detestamos, consideramos necesario. Todo. Es el otro código, el morse de la ciudadanía. Al que se someten, Susana Díaz y los demás. Por igual.

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