Las instalaciones del Varadero Guadalete, en el número 7 de la avenida de la Bajamar, han sido derribadas en los últimos días, desapareciendo los edificios que albergaban la empresa y quedan tan solo el cerramiento de las instalaciones.

La actividad en el varadero ya era nula desde hace más de un año ya que la empresa prácticamente había desaparecido. El varadero Guadalete ha sido el último refugio de el vapor Adriano III, cuyo nuevo propietario lo trasladó allí hace ya más de dos años con la intención de proceder a su reparación. No obstante, los problemas económicos por los que atravesaba la empresa y la dificultad que entrañaba la rehabilitación del barco dieron al traste con estos planes, y la célebre nave continúa en estas instalaciones sin que se sepa nada más acerca de su futuro.

En los últimos días una asociación portuense ha pedido al Ayuntamiento que trate de recuperar la nave como reclamo turístico, situándola en tierra ya que se descarta que el Vapor pueda volver a navegar algún día, debido a lo costoso que resultaría el proceso de rehabilitación de la embarcación.