La hermandad del Rocío tiene previsto celebrar mañana una procesión con la talla de la Blanca Paloma a la que le rinde culto en la parroquia de San Joaquín. El cortejo partirá del templo de la calle Cielo en torno a las diez de la mañana. Una hora antes está prevista una eucaristía que será oficiada por Enrique Soler, delegado diocesano de Patrimonio.

La filial lleva desde 2009 organizando esta procesión aunque normalmente la realiza a finales de junio o principios de julio. Sin embargo, dado que este año es especial para los rocieros ya que es año jubilar y, además, se ha producido el tradicional traslado de la talla desde la Aldea de El Rocío hasta Almonte, la hermandad decidió realizar este acto de culto externo una vez pasados los actos en la localidad onubense. No obstante, la intención de la corporación es que el año próximo vuelva a sus fechas habituales.

Y dado que es un año extraordinario, la junta de gobierno, que dirige Javier de la Cruz, decidió que la Virgen procesionara de pastora tras la donación de unas vestiduras por parte de un hermano. Será la primera vez que la imagen no vaya con su habitual estética de reina.

La Virgen del Rocío será llevada por la ciudad mediante unas andas que son la base de su futuro paso. Estos trabajos han sido encargados al jerezano Antonio García que tiene previsto realizar un templete con una estética similar al de la Blanca Paloma de Almonte (en años anteriores la filial portuense utilizó uno prestado por una hermandad sevillana).

El recorrido que hará el cortejo será el siguiente: Cielo, Vicario, plaza de España (donde entrará en la Iglesia Mayor Prioral para situarse ante la Patrona, la Virgen de los Milagros), Palacios, nevería, Luna, Larga, plaza Peral, Diego Niño, Caldevilla, Cielo y a su templo.