El déficit público en 2009 será "sustancialmente superior" al 3% del PIB. Lo confirmaron ayer tanto el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, como su vicepresidente económico, Pedro Solbes, que justificaron este incremento por encima de las previsiones anteriores por el esfuerzo adicional de gasto que se afrontará para hacer frente a la crisis.

En el ámbito financiero, Zapatero consideró que los bancos están siendo "demasiado cautos" a la hora de conceder créditos y anunció que tiene previsto reunirse de nuevo con los presidentes de las instituciones financieras a finales de enero. Además, dijo no ver motivos para que Standard & Poor's, la agencia de calificación de riesgo, pueda rebajar el rating de solvencia de la deuda pública de España.

Solbes anunció que el Gobierno revisará el cuadro macroeconómico a la baja este mismo viernes. El ministro presentará el nuevo programa de estabilidad al Consejo de Ministros con cifras "más concretas". En cuanto al déficit de las cuentas públicas, reconoció que "superará algo" el 3% en 2008, mientras que "será sustancialmente superior a esa cifra en 2009 como consecuencia del esfuerzo adicional de gasto del Gobierno para afrontar la crisis.

Zapatero se mostró más cauto: "Hay que ver cómo evoluciona la economía, porque el déficit depende de lo que va a gastar o a ingresar el Estado". En cualquier caso, dijo que el déficit público superior al 3% será la nota común en otros países del entorno europeo, y aventuró más déficit en 2010, aunque recordó que el Pacto de Estabilidad Presupuestaria contempla circunstancias excepcionales en las que se puede superar el límite de Maastricht.

Confió el presidente en recuperar tasas positivas en las cuentas públicas más adelante porque el PSOE ha demostrado ser un Gobierno que ha logrado registrar superávit durante cuatro años y reducir la deuda a los niveles más bajos de su historia, lo que permite que ahora se pueda invertir y hacer políticas sociales. "Es lo que ha hecho Alemania y lo que ha hecho Barack Obama, el único que no quiere invertir más es el PP", ironizó.

En cuanto a la crisis financiera, resaltó en primer lugar que el Gobierno "no regala dinero a los bancos". Cuando se le preguntó si no están tardando demasiado en facilitar el crédito a Pymes y familias, Zapatero reconoció que actualmente los bancos "deben hacer frente a sus compromisos", pero añadió que están "muy cautos, demasiado cautos".