Economía

Las cajas encaran las elecciones sindicales con casi 50.000 empleados menos

  • Las centrales convocan comicios el 26 de noviembre en un sector mucho más pequeño que en 2010

Las cajas de ahorros han reducido su plantilla en 45.484 personas en cuatro años, al pasar de 128.165 empleados de 2010 a 82.682 en 2014. En este periodo de tiempo, el número de entidades también se ha contraído, de 37 a 16, debido al proceso de reestructuración acometido, según los datos de CCOO-Comfia.

En este nuevo escenario, CCOO, UGT y Csica han convocado elecciones sindicales en el sector para el 26 de noviembre, una cita a la que están llamados a votar 68.901 trabajadores de 12 entidades, informó Comfia.

Los preavisos electorales se presentaron ayer conjuntamente en 230 circunscripciones, de las que saldrán 1.984 delegados. Las entidades en las que se celebrarán elecciones son Caixabank, Bankia, Unicaja, Cajasur Banco, BMN, Liberbank, Banco CCM, Abanca, Catalunya Banc, Cecabank, Caixa Ontinyent y Caixa Pollença.

Por bancos, se elegirá el mayor número de delegados en Caixabank con 727, y en Bankia, con 398. Por comunidades, destaca Andalucía con 457, seguida de Cataluña, con 291, y Madrid, con 240. Kutxabank votará el próximo 14 de diciembre por acuerdo de toda su representación sindical. Tanto Ibercaja y Caja 3, en plena integración, como Ceiss, por retrasos anteriores, deben formalizar un acuerdo de calendario distinto.

Las elecciones sindicales anteriores se celebraron en 2010, en un escenario distinto al actual, con 37 entidades y 128.165 trabajadores, frente a las 16 actuales, que emplean a 82.681 personas. Algunas, como Unnim y CAM, Caixa Penedès, y recientemente Caixa Catalunya, han sido adquiridas por entidades de banca.

Según CCOO-Comfia, el proceso que se inicia ahora será un examen a la actuación sindical en el proceso de reestructuración, marcado por "graves conflictos y fuertes movilizaciones y con el lastre de la reforma laboral".

También se tendrán muy en cuenta las expectativas de futuro. Para CCOO las antiguas cajas de ahorros deben de entrar en un cauce de normalización y recuperación, tanto de condiciones del empleo como laborales, de poder adquisitivo, de igualdad y de desarrollo profesional.

El resultado determinará también la composición de la Mesa para el Convenio de Ahorro, que ambas partes, la representación sindical y la patronal Acarl (Asociación de Cajas de Ahorros para las Relaciones Laborales), están dispuestas a negociar con independencia del Convenio de Banca.

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