El próximo sábado, entre las nueve de la mañana y las dos de la tarde, un estand de la Agencia Provincial de la Energía de la Diputación de Cádiz ofrecerá en el Mercado Central de Abastos de Cádiz información sobre la recogida y el reciclaje del aceite usado doméstico. Esta es una de las acciones propiciadas por la Corporación Provincial, en colaboración con Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cádiz, que tendrá su continuidad el sábado 7 de marzo de 2015 en el Mercado de Nuestra Señora del Rosario, para que se tome conciencia sobre el correcto reciclado del aceite usado de cocina.

Estas acciones se enmarcan en el proyecto RecOil, una iniciativa financiada por la Unión Europea en el marco del Programa Energía Inteligente para Europa, en la que participa la Agencia Provincial de la Energía junto a entidades de seis países europeos, con el objetivo de incrementar la producción sostenible de biodiesel y su consumo en la provincia, mejorando la recogida y transformación del aceite de cocina usado. La campaña es fruto de un convenio de colaboración impulsado por la Diputación y firmado el pasado mes de abril con el Ayuntamiento de Cádiz, y la empresa de recogida de aceites usados Biouniversal.

Quien se acerque al estand el sábado en el Mercado Central de Cádiz podrá recoger un folleto informativo sobre cómo y por qué reciclar el aceite usado de cocina, una guía práctica sobre el biodiesel y obtener información sobre la energía renovable y la eficiencia energética.

El aceite usado de cocina es un residuo cuya presencia en el medio natural tiene consecuencias ambientales: pequeñas cantidades de aceite usado pueden ocasionar importantes problemas de toxicidad en ríos, marismas y otros ecosistemas naturales, informa la Agencia Provincial de la Energía. También es un problema económico: el aceite dificulta el funcionamiento de las depuradoras municipales y encarece el mantenimiento del alcantarillado público. Se estima que cada litro de aceite usado vertido a la red de saneamiento incrementa el coste de depuración en 2,25 euros.

En esta campaña se informa de que verter el aceite usado por el fregadero es una práctica poco respetuosa con el entorno natural, que además deteriora y obstruye las cañerías del hogar, genera malos olores y favorece la proliferación de ratas e insectos. Reciclar el aceite doméstico usado depositándolo en los puntos de recogida es un gesto sencillo, cómodo y limpio con el que los ciudadanos consiguen reducir los daños ambientales y sobrecostes económicos y con el que además se favorece el aprovechamiento del aceite usado en forma de biodiésel.