Nueva derrota de un San Fernando que sigue sin puntuar en su regreso a la categoría de bronce del fútbol español, sufriendo anoche la remontada de los locales del Atlético Mancha Real jienense en el segundo periodo con una diana psicológica nada más reanudarse el juego cuando se había llegado al descanso con un 0-1. Se trataba de un partido de equipos recién ascendidos que tienen el mismo objetivo: lograr la permanencia en el grupo cuarto de Segunda División B. Por este motivo, la igualdad fue la nota característica en un compromiso de ida y vuelta entre anfitriones e isleños, contendientes que se entregaron durante los 90 minutos en busca de la victoria. Se la quedaron los verdes, por desgracia.

Afrontaba el San Fernando un encuentro complicado, y más en una salida furiosa de los locales, personificada en Elady. El primer intento del delantero llegó a los dos minutos y poco después repitió en un intencionado lanzamiento de falta. Los verdes salieron a presionar muy arriba y las posesiones gaditanas eran cortas y estériles. Eso sí, Dani Martínez creó peligro en la primera llegada azulina y poco a poco el San Fernando se sacudió esa presión y llegaba al marco adversario.

El partido era bonito, con idas y venidas en un fútbol dinámico. Amarito y Carralero le hacían cosquillas a la defensa del Mancha Real, pero las zagas imponían su ley ante los dos ataques. Buscaron la meta rival unos y otros, aunque en la primera mitad las ocasiones de peligro escasearon, en especial después de ese arranque dinámico.

El San Fernando estuvo bien plantado en el terreno de juego. Se adaptó perfectamente a las dimensiones del estadio de La Juventud y tanto Edgar como Gerrit estuvieron muy activos, aunque donde destacó la escuadra de Antonio Méndez fue en la presión.

Los isleños no dejaron maniobrar al Atlético Mancha Real en los primeros 25 minutos. Manolillo, Elady y las acciones de estrategia fueron el arma del Mancha Real, pero en la recta final de este periodo Gerrit, el futbolista malagueño, marcó el 0-1 en una jugada de falta cuando se llevaban 41 minutos. Este tanto lo acusaron los mancharrealeños. Fue un jarro de agua fría debido a que el partido estaba en la recta final de la primera mitad, aunque en esos instantes el San Fernando buscó el segundo gol por medio de Iván. Falló su opción la escuadra azulina y al receso, cero a uno.

El comienzo del segundo tiempo fue clave. En el minuto inicial Airam marcó el empate a uno cuando los equipos aún se estaban posicionando en el campo. Una jugada que sería determinante, ya que los de Jaén tuvieron ahí una inyección de adrenalina.

Supo reaccionar el conjunto visitante ante la adversidad de la igualada y en la siguiente acción estuvo a punto de llegar el 1-2, pero el defensa León salvó en la misma línea de gol, otra acción fundamental para el desenlace adverso de la contienda.

Empezó un nuevo partido con idas y venidas en cada meta, tablas en lo alto de La Juventud y mucho interés por lo que se veía en el verde, un buen encuentro. Emilio Muñoz y Salva de la Cruz tuvieron trabajo y ahí apareció la figura de Jonathan Rivera. El centrocampista del Mancha Real se incorporó al ataque y generó dos claras ocasiones de gol en los minutos 57 y 65, aunque el San Fernando no se rendía en ningún momento.

La entrada de Francis le dio más dinamismo al cuadro del San Fernando, que también contó con ocasiones, pero en el minuto 70 marcó Josema y se desató la euforia en La Juventud, culminando la remontada del once de Jaén. El Mancha Real, campeón de su grupo la pasada campaña de Tercera División, se defendió con orden tras el tanto y dejó la iniciativa al San Fernando, que pudo empatar en una acción de Francis, pero su volea se marchó fuera por poco.

En el minuto 82, el delantero Ángel tuvo el 3-1 en sus botas, pero su lanzamiento se estrelló en uno de los palos de la portería defendida por Salva.

Ya en el tiempo de prolongación, el San Fernando pudo igualar. Iván hizo trabajar a Emilio Muñoz, que salvó el gol con una gran parada. El partido terminó con 2-1 y los isleños acumulan dos jornadas sin ganar y, lo que es peor, sin puntuar. Pero ayer hubo síntomas claros de progresión y mejora. Eso también es importante porque permite tener esperanzas de cara a jornadas venideras a pesar de esta decepción frente a otro de los recién ascendidos de categoría.