El Comité de Competición de la Gaditana va a tener trabajo con la suspensión del Florida-Guadiaro de Segunda Andaluza a tenor de la redacción del acta que hizo el árbitro del encuentro, Miguel Ángel Molina Sánchez, que además de insultos racistas a su asistente Mulay Legzal Mulay asegura que hubo invasión de campo por parte de aficionados locales e intento de agresión a jugadores visitantes, razonando la suspensión del encuentro al señalar que las fuerzas del orden no podían quedarse en el campo hasta el final del partido.

En el apartado de público, el árbitro reseña que "en el descanso me percato que dos aficionados, siendo identificados como aficionados del equipo local por sus cánticos y sus gritos, se colocaron en la bocana de vestuario al lado de mi asistente número 2 amenazándolo con insultos racistas diciéndole 'Tú lo que eres un moro de mierda' y con que lo van a agredir alzando el puño en alto en forma de amenaza con agredirlo físicamente sobre su rostro, llegándole a lanzar el puño sin llegar a impactarle. En el minuto 72 me llama mi asistente número 1 para comunicarme que un aficionado se le dirige con insultos racistas en los siguientes términos: 'Tú lo que eres un machupichu de mierda', 'Lo que tienes que hacer es irte a tu país machu de mierda', llegándole a escupir dos veces en la espalda".

El árbitro portuense hace constar que ninguno de los dos delegados firma el acta por no haberla finalizado en el campo y en el apartado de la suspensión del partido detalla que "el encuentro se suspendió en el minuto 77 debido a que invadieron el terreno de juego varias personas identificadas como aficionados del equipo local debido a sus indumentarias, porque poseían el escudo del equipo local, empezando una trifulca con los jugadores del equipo visitante, intentándolos agredir y amenazándolos. Viendo lo ocurrido en el terreno de juego doy por suspendido momentáneamente el encuentro viendo que peligraba la integridad física de los jugadores del equipo visitante, mis dos árbitros asistentes y mi integridad física. Una vez en el vestuario comunico al delegado del equipo local que llame a las fuerzas de orden público para intentar reanudar el encuentro. Pasados varios minutos en el vestuario arbitral, se presenta el señor Oñate, identificándose como presidente del club local y comunicándome que han llamado a las fuerzas de orden público y que no sabe si van a poder presentarse en las instalaciones".

Añade el colegiado en el acta que "pasados unos 15 minutos desde que se presentó el presidente del equipo local y viendo que no aparecía ninguna persona de las fuerzas de orden público me percato (sic) yo personalmente a llamarlas para poder saber si se iban a presentar en las instalaciones, comunicándome las fuerzas de orden público que no habían recibido ninguna notificación ni llamada del presidente del equipo local sobre lo sucedido y presentándose a los 7 minutos después de mi llamada a las fuerzas de orden público. Una vez que se presentan las fuerzas de orden público en las instalaciones me comunican que no pueden permanecer en ellas, no pudiéndome asegurar mi seguridad ni la de mis asistentes durante lo que restaba de encuentro, teniendo que dar el partido por suspendido finalmente, acompañándonos hasta el vehículo arbitral".