La selección española de fútbol recibirá hoy a Ucrania con la única consigna de ganar para intentar enderezar el rumbo en su camino hacia la clasificación para la Eurocopa de Francia 2016 después del tropiezo ante Eslovaquia.

El Ramón Sánchez-Pizjuán será el principal aliado de la selección. No en vano, se juega el partido número 25 en este recinto y jamás salió derrotado el equipo nacional ni en partido oficial ni en ningún amistoso. Será el escenario de un duelo que ayudará a definir las posiciones del Grupo C. Eslovaquia manda con 12 puntos en cuatro jornadas, tres más que España y Ucrania dentro de un cuadro que concede la clasificación para los dos primeros.

La selección española, actual campeona continental, está obligada a ganar en su primer partido de 2015. También para recuperar sensaciones y la confianza perdida por parte de una hinchada que acabó 2014 con cierto desencanto y dudas sobre la regeneración del equipo.

La ilusión llega por parte de jóvenes como Isco y Morata, futbolistas llamados a formar parte del futuro de la selección española. Ahora les toca mostrar si también son presente. Es muy probable que ambos entren en la alineación. Si Isco está brillando con el Real Madrid, lo mismo se puede decir de Morata, delantero titular en la Juventus gracias a sus innegables progresos. La ausencia por lesión de Diego Costa le deja vía libre en la delantera.

El seleccionador español, Vicente del Bosque, llenará el equipo con veteranos como Casillas, Sergio Ramos, Piqué o Iniesta. La duda es el medio centro Sergio Busquets, quien llegó muy justo a la cita por una lesión de tobillo. Koke y Cesc Fábregas sí parecen tener un puesto para completar la medular.

No sólo el Sánchez-Pizjuán es una garantía de fiabilidad, España lleva un saldo de 25 victorias y cuatro empates en los últimos 29 partidos jugados como local y no pierde delante de sus aficionados desde el 7 de junio de 2003, cuando cayó 1-0 ante Grecia. En sus duelos ante Ucrania se mantiene invicto con un balance de dos triunfos y un empate. Está claro que las estadísticas no pueden ser más favorables.

Ucrania acude a la cita con buenas sensaciones después de ganar los tres últimos partidos, dos de ellos como visitante. Enderezó el rumbo tras su derrota inicial ante Eslovaquia y el partido ante España supone todo un reto para el combinado de Mykhaylo Fomenko. No se espera de Ucrania otra cosa que un equipo muy junto cerca de su área, renunciando a la posesión y buscando el contraataque, que quedará fiado a las maniobras de los puntas Zozulya y Oliynyk.

El Sánchez-Pizjuán presentará un magnífico aspecto para ver el primer partido del año de la selección española, que intentará borrar cuanto antes el mal recuerdo de 2014.