El ciclista australiano Michael Matthews (Orica), que se adjudicó la tercera etapa de la Vuelta a España disputada entre Cádiz y Arcos de la Frontera, triunfo que además le supuso enfundarse el maillot rojo de líder, manifestó en la posterior rueda de prensa que es "un sueño" porque adora España y la Vuelta.

"No se puede pedir más, mi equipo ha trabajado mucho porque éramos favoritos en este terreno. Dependía de nosotros la victoria, mis compañeros lo han dado todo para que yo este aquí y entre todos lo hemos conseguido", aseguró.

"La temporada está saliendo por el momento mucho mejor de lo que esperábamos; llevar el maillot rojo es un sueño cumplido para mí porque adoro este país y la Vuelta a España", manifestó el corredor, de 23 años, que consiguió de esta forma su tercer triunfo de etapa en la Vuelta y la quinta en la presente temporada, en la que también se incluye una lograda en el pasado Giro de Italia.

Matthews, que en la meta de la localidad arcense alzó los brazos por delante del irlandés Daniel Martin (Garmin) y del español Purito Rodríguez, subrayó su intención de conservar el primer puesto durante los próximos días. "Espero quedarme con el maillot rojo el mayor tiempo posible, en esta etapa no había nada planeado de antemano aunque todo suma. Entre Algeciras y San Fernando tuve mala suerte, pero estoy en forma y lucharé por ganar más etapas", afirmó.