La sufrida victoria del Cádiz sobre el Numancia quedó empañada por una acción fuera de lo común que protagonizaron dos jugadores del equipo amarillo, Abdullah y Álvaro García. En el tramo final del encuentro, lo que empezó como un intercambio de palabras entre ambos acabó con las manos de por medio al golpear el centrocampista francés al extremo utrerano. Cuál no sería la dimensión que alcanzaron los hechos que el consejero delegado, Quique Pina, bajó antes de acabar el encuentro al campo y se le pudo ver al final llevándose a un lado a Abdullah mientras ambos hablaban de lo sucedido.

La acción resultó muy inquietante porque mientras esa discusión tomaba forma y los dos jugadores se acercaban uno a otro con intenciones poco amistosas, el partido seguía con un robo de balón del equipo soriano que a punto estuvo de dar un buen susto. De lo sucedido entre Abdullah y Álvaro fueron testigos varios compañeros aunque a Dani Güiza le alcanzó bastante cerca la desafortunada acción.

Fuentes del club consultadas anoche por Diario de Cádiz confirmaron que, tras llegar ambos a las manos, en el palco se produjo casi una estampida con consejeros y dirigentes tomando la escalera y el ascensor para bajar al césped. Prueba de ello es que nada más decretar el colegiado el final del encuentro, Quique Pina accedió al terreno de juego para llevarse a Abdullah, que no paraba de discutir con Álvaro.

Buena parte del público presente en el Carranza se percató de lo sucedido, pues después de esa agria acción pitó al centrocampista francés cada vez que tocó el balón.