La expectación aumenta en Ferrol a medida que se acerca la hora del partido. Las taquillas del estadio A Malata se atestaron ayer de cientos de aficionados que formaron largas colas para comprar sus entradas. La atención en la ciudad de la provincia de La Coruña está acaparada por un encuentro que despierta el máximo interés al tratarse de la fase de ascenso a Segunda División A y además contra un rival de peso histórico como es el Cádiz. Ha costado, pero la masa social del cuadro de Miguel Ángel Tena se está despertando ante una cita de gran importancia.

La desilusión que había supuesto en la hinchada local la pérdida del primer puesto del grupo I en la última jornada del campeonato de Liga -después de 31 jornadas consecutivas al frente de la clasificación- queda en el olvido y la esperanza entre los verderones renació tras el empate a cero del encuentro de ida que obliga a un desenlace de la eliminatoria en territorio gallego.

Las taquillas estarán abiertas hoy desde primera hora de la mañana para atender a los seguidores que se apunten a presenciar in situ el partido. No faltarán aficionados del Cádiz que también se han acercado para adquirir sus localidades y se sumarán a los cien que viajaron en autobús desde la capital gaditana. El equipo amarillo no estará solo en tan importante cita pese a que, como es lógico, habrá una inmensa mayoría de público local que apretará de lo lindo desde la grada.

Si se mantiene el tirón de última hora, es posible que el estadio A Malata supere la mayor afluencia de espectadores de la temporada, establecida en 9.000 personas cuando el Racing de Santander visitó el estadio ferrolano en la penúltima jornada de Liga. Lo que no se prevé, salvo sorpresa, es que se complete el aforo del estadio, que tiene capacidad para acoger a 12.000 aficionados.