Al Cádiz nada le iba ni le venía en la última jornada de Liga con los deberes más que terminados. Hace tres semanas que se hizo con la primera plaza de manera definitiva y desde entonces el trabajo estaba enfocado a la preparación para el decisivo play-off. La convocatoria del líder, plagada de canteranos -hasta seis promesas desplazó Claudio Barragán y muchos titulares no viajaron-, era la demostración palpable de que el encuentro no servía de nada y que lo importante de verdad es que no hubiera lesionados.

El equipo amarillo tenía y tiene la mente puesta en la fase de ascenso y la visita, ya inoportuna, al Arroyo no dejaba ser un mero trámite de obligado cumplimiento. No ofreció una buena imagen y fue vapuleado por un conjunto local que, pese al contundente triunfo, se va de cabeza a Tercera División después de tres campañas seguidas en la categoría de bronce.

La derrota es intrascendente y en nada afecta al play-off, que debe ser otra historia completamente distinta. El Cádiz está centrado al cien por cien los partidos que vienen a partir de ahora, en los que se juega toda la temporada.

El de Arroyo fue ayer un partido que se vivió mucho más intensamente desde el transistor. En el Municipal todo se encarriló llegada la media hora de juego, con el gol de Rojas. Pero las buenas noticias desde las ondas no llegaban. Ni Cacereño, ni Jaén, enturbiaron la jornada por la zona baja. Ellos ya tenían los deberes hechos.

El Cádiz, ya campeón y plagado de caras nuevas, se presentó en Arroyo porque le tocaba, nada más, pero con su mente en la semana siguiente, en la que empieza su andadura por vestirse de plata. Hizo el pasillo el Arroyo a los amarillos, ayer de negro en el Municipal. Un pasillo que recibieron jugadores que debutaban ayer con el conjunto gaditano, como Manu Sánchez, Pepe Castaño y Alberto Quintana, presentes en el once inicial. Durante el transcurso de la segunda mitad entraron Román y Carri. Los cinco se estrenaron de manera oficial con el primer equipo, algo que no olvidarán nunca pese a debutar con una derrota.

Aún así no comenzaron mal los de Claudio Barragán. En los primeros compases, los andaluces estuvieron intensos y buscando combinar entre líneas, pero el Arroyo no estaba para dejarse amedrentar en su campo cuando el partido era a vida muerte.

Poco a poco se hicieron notar en el campo Casi y Rojas, que coincidían en el once inicial por primera vez esta temporada. Quizás un recurso del que podría haber sacado más provecho el técnico local en la recta final de la Liga. Ayer dio sus frutos, aunque ya era demasiado tarde.

Poco antes de la media hora de juego se adelantaron los arroyanos. Un balón al área de Santi Polo fue peinado por Rojas para hacer el primero ante la fallida salida de Alonso, nada afortunado en esa acción.

A punto de llegar al descanso llegaría el segundo de los anfitriones, el gol que haría un mero trámite de la segunda mitad. Armero fue el encargado de sentenciar desde el punto de penalti merced a una pena máxima un tanto extraña.

En este tramo final del primer periodo disfrutaron los espectadores con el buen juego de los suyos, haciendo dos dianas ante uno de los históricos del balompié español y ya campeón del grupo como es el Cádiz, pero lo necesario, las noticias positivas desde otros campos, no terminaba de llegar.

Con todo el pescado vendido, la segunda parte se desarrollaba sin novedad hasta el minuto 66, cuando el conjunto extremeño marcaba la tercera y definitiva diana. El gol nacía de una eficaz combinación entre Casi y Rojas. El primero se escapaba por una banda y ponía el tanto en bandeja para que el segundo, atento, agradeciera el pase para empujar la pelota al fondo de la portería.

La mejor ocasión de los visitantes sería para Migue García, que chutó contra el lateral de la red tras filtrarse bien por banda izquierda. Fue el más incisivo de los suyos. Él y Navarrete dejaron muy buen sabor de boca en Arroyo y demostraron estar preparados para lo que se avecina en las próximas semanas, que no es poco.

Los últimos minutos del choque, ya con Román y Carri sobre el tapete artificial del Municipal de Arroyo de la Luz, sirvieron para poco más que los locales estuvieran pendientes de los resultados en otros campos, pero al final el milagro no se produjo. El Arroyo, descendido, sumó una amarga victoria que no pudo disfrutar y el Cádiz se llevó una derrota que no sabe a nada porque ese partido, por fortuna para los amarillos, estaba tachado del calendario desde hace varias semanas gracias a su excelente segunda vuelta. El campeón regresó tranquilo a casa con la cabeza puesta en el sorteo de la fase de ascenso. Ahora es cuando de verdad empieza lo bueno.

ÁRBITRO: Barbeira Juste (asturiano). 

TARJETAS: Amarillas Amonestó a los visitantes Arregi, Hugo y Alberto. 

GOLES: 1-0 (27') Rojas.2-0 (42') Armero, de penalti.3-0 (66') Rojas.

INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la 38ª jornada del campeonato de Liga disputado en el Municipal de Arroyo de la Luz (Cáceres) en presencia de unos 1.100 espectadores.