La previsible baja de Juan Villar en el duelo provincial contra la Balona -próximo sábado a partir de las seis de la tarde- abre de par en par la puerta de la puja en la plantilla cadista para ocupar el hueco que deja huérfano el onubense en la banda derecha. El jugador se halla inmerso en la fase de recuperación de una pequeña rotura muscular en una pierna sufrida durante el partido contra el Almería B disputado el pasado 28 de marzo.

El elemental principio de cautela invita a pensar en que seguirá el choque desde la grada porque no hay necesidad de forzar. El Cádiz domina con autoridad en el grupo IV -ocho puntos de ventaja sobre el segundo en la tabla, el UCAM Murcia- y, con la obligación a pensar en lo que se avecina una vez concluida la Liga, la prioridad es que todos los integrantes del plantel (19) lleguen al tramo decisivo de la temporada en las mejores condiciones.

En el reciente partido contra El Palo -disputado el pasado domingo- fue Hugo Rodríguez el inquilino de ese costado ante la ausencia del habitual 7, aunque la presencia del gaditano en el Municipal San Ignacio de Málaga no garantiza, ni mucho menos, que vaya a figurar en el once inicial del encuentro programado para el próximo sábado en la cita contra el cuarto clasificado.

El recorrido de Hugo desde su aterrizaje en el conjunto amarillo en la recta final del mercado de invierno refleja una situación que llama la atención cuando hoy se cumplen dos meses desde su estreno oficial como cadista en el envite contra el Granada B disputado el 8 de febrero en el estadio Nuevo Los Cármenes. El mediapunta participa en todos los compromisos en los que está disponible, pero su rol varía de manera de radical en función de si el equipo juega en el estadio Carranza o lo hace a domicilio. Y es que, hasta la fecha, Hugo nunca es suplente cuando al conjunto amarillo le toca ejercer de anfitrión, y en cambio sí aparece entre los once elegidos por el entrenador cuando el líder comparece lejos de su feudo.

El ex de La Hoya Lorca es uno de los fijos en las alineaciones en las salidas. Se estrenó como futbolista del Cádiz y a la vez como titular frente al filial granadino en un partido que jugó completo. En la siguiente visita, ante el cuadro lorquino, no viajó al no poder participar en el choque contra su último equipo debido a una cláusula en el contrato de traspaso. Pero cuando volvió estar disponible en el posterior desplazamiento del Cádiz al campo del Cacereño, Hugo regresó a la titularidad, participó los 90 minutos y celebró su primer mes como cadista con la mejor actuación desde su llegada, incluido un gol -el primero con el equipo de su tierra- que abrió el camino de una importante victoria.

En la provincia de Huelva, contra el San Roque de Lepe, el único fichaje del club en el mercado invernal no faltó en el once inicial, aunque fue sustituido a falta de un poco de un cuarto de hora para el final. El gaditano fue titular también en la cita en el terreno de El Palo y el técnico decidió cambiarlo poco después del arranque de la segunda parte.

Claudio Barragán apuesta a las claras por Hugo en las visitas, pero no tanto en los partidos de casa, en los que el míster se decanta por otras opciones. El atacante nunca está sobre el césped del Carranza en el pitido inicial, aunque siempre acaba jugando en la segunda mitad. En el partido contra el Jaén entró en el minuto 55, y frente al UCAM Murcia salió con poco más de diez para el 90. Ante el Melilla accedió al campo con el tiempo casi cumplido, mientras que el duelo ante el Sevilla Atlético sustituyó a un compañero en el ecuador del segundo acto. Contra el Almería B, el gaditano aportó su grano de arena en los últimos diez minutos en el encuentro más cercano en el tiempo. La Balona llega ahora al Carranza y Hugo se dispone a pelear durante los entrenamientos de la semana por un puesto en el once, como el resto de los integrantes de la plantilla. Su objetivo es ser titular también delante de la afición. La decisión, al final, corresponde tomarla al entrenador.