Uno de las motivos por los que el Cádiz anda cada vez más cerca del liderato -a sólo cuatro del UCAM Murcia cuando hace dos semanas estaba a ocho gracias a los pinchazos de la escuadra universitaria- es el aumento de la eficacia goleadora a medida que avanza la competición. Con 26 dianas en la mochila, el conjunto amarillo es ya el máximo anotador del grupo IV y el quinto de toda la Segunda División B, aunque muy lejos de un Oviedo -líder del grupo I- que encabeza la lista y asusta con sus números: 38 dianas en 16 partidos (una media de más dos por encuentro).

El salto cuantitativo que da el Cádiz en la faceta goleadora se deja notar en las últimas diez jornadas, en las que no ha dejado de marcar en ningún partido hasta acreditar una cifra de 21 tantos, que se unen a los cinco escasos obtenidos en los seis partidos a comienzos del campeonato.

El potencial ofensivo de los gaditanos queda reflejado en un dato: sólo ha dejado de marcar en dos partidos ya lejanos en el tiempo. No pudo perforar la portería en el estadio Ramón de Carranza ante La Roda en la tercera jornada (el único compromiso casero en el que no ha visto puerta hasta la fecha) y tampoco lo hizo a domicilio frente al UCAM en el sexto choque del torneo liguero que derivó en la primera derrota del presente ejercicio (la única vez que no bate al cancerbero del otro equipo fuera de casa). Desde finales de septiembre no se queda el equipo amarillo sin perforar la portería contraria. Es decir, hace dos meses y medio.

Destaca como curiosidad que el Cacereño, 16ª clasificado con 17 puntos y 19 goles a favor, marca en todos los partidos salvo en uno (derrota en Jaén por 4-0), aunque es el equipo más goleado del grupo IV con 29 dianas en contra.

Los amarillos, que en el pasado campeonato liguero fueron los máximos goleadores de toda la división de bronce, se postulan de nuevo para gobernar al menos en el grupo IV dada la jugosa ventaja que lleva el Oviedo. La vocación ofensiva del Cádiz está fuera de toda duda no sólo por la creciente suma de tantos, sino por la cantidad de ocasiones que es capaz de generar. Los tres goles marcados el pasado domingo en Cartagena pudieron haber sido más -estrelló dos lanzamientos en los palos- y ante el Lucena, además de un penalti desperdiciado, las oportunidades fueron numerosas, al igual que en el tramo inicial de la visita a la Balona -un disparo al poste con ventaja de 0-1 y después secunda derrota del curso- y en el duelo contra El Palo que acabó en empate a uno después de dejar escapar buenas opciones de gol.