La primera plantilla protagonizó ayer una sesión matinal de trabajo bastante novedosa pues la misma tuvo como escenario la playa Victoria, un lugar que en tiempos pretéritos se utilizaba mucho más que en lo que llevamos de siglo XXI para que los jugadores efectuaran ejercicios de corte preferentemente físico.

Convertidos en centro de atención de los bañistas y paseantes más madrugadores, Antonio Calderón, sus pupilos y los restantes técnicos empezaron sobre las 10 de la mañana con su tarea sobre la arena, consistiendo esta en carreras y ejercicios de diverso tipo que mantuvieron entretenidos a los futbolistas antes de darse el consabido y merecido chapuzón que puso la guinda. Lo de correr no fue moco de pavo pues llegaron más allá de Cortadura y volvieron hasta el hotel Playa.

Cabe reseñar que una de las cosas más positivas radicó en que el lateral izquierdo Andrés Sánchez, aún inédito en lo que se lleva de pretemporada, trabajó a similar nivel que el resto del grupo, por lo que se antoja que su recuperación se halla muy avanzada y que en breve se le puede ver actuando en algún partido amistoso. La preocupación por su estado era muy elevada y parece que la misma ha desaparecido casi del todo. Por contra, hubo tocados como Tomás y Airam que se pusieron en manos de los fisioterapeutas sobre la misma arena.