Izquierda Unida insiste en sus alegaciones al Plan General de Ordenación Urbana en mejorar la conexión ferroviaria en el casco histórico. Según indicaron el edil Sebastián Terrada y el responsable del área de Urbanismo, Juan Manuel Fernández, este transporte da la "espalda" al casco histórico. Una persona que llegue a la ciudad en tren con destino a intramuros tendrá que recorrer unas distancias que oscilan entre los 320 metros, distancia desde el vestíbulo y la plaza de Sevilla, o los cerca de dos kilómetros del punto más alejado pero que viene a coincidir con la ubicación de las facultades.

IU da alternativas. La primera, prolongar el ferrocarril hacia la plaza de España mediante un subterráneo. Las otras incluyen tranvía: éste partiría del lateral de la estación férrea, vendría desde el puente por la avenida de Huelva o por la de las Cortes, y acabaría circunvalando el casco histórico hasta la altura de la Caleta.

Izquierda Unida mostró su preocupación por los transportes públicos frente a un PGOU que, a su juicio, apuesta por el vehículo privado: no refuerza los autobuses (la línea 1 no llega a Torregorda como querría IU) y el plan de carriles bici consiste en "líneas pintadas en un papel que no convencen, parecen hechas deprisa y corriendo", indicó Terrada.

Otra de las líneas generales que inspira el medio centenar de alegaciones presentadas por IU es la protección del comercio tradicional, a su juicio amenazado por la previsión de crear 142.190 metros cuadrados de zonas comerciales. IU quiere que se rebaje esta cifra y también un plan de protección y mejora del comercio, que genera según sus cálculos 3.000 empleos.

Sebastián Terrada reiteró su disconformidad con la actuación planteada en la estación de autobuses, donde se crea un hotel de doce plantas y terciario y se pregunta si esa operación está relacionada con una supuesta venta de la empresa Comes. Tampoco cree conveniente la actuación en Alcalde Blázquez que acaba con la galería actual y se pregunta si se está "compensando" a alguien.

IU también rechaza la vertiente taurina de la multiusos, uniéndose así al aluvión de alegaciones contra ese equipamiento alentado por una plataforma anti plaza de toros.

En materia de vivienda, propugna una ampliación del número de viviendas protegidas frente a las libres y cree que en suelos públicos (como el del hospital) sólo se deberían construir del primer tipo. Asegura que la suma de las unidades de ejecución da como resultado más pisos libres que protegidos y que si no se cuentan los pilotados, que son "imposibles de hacer", el porcentaje de protegidos es del 30%.

Por último, el edil de IU aboga por la apertura del Puerto a la ciudad y señala algunas "contradicciones" en el documento urbanístico: por ejemplo, que en un punto se hable del único sentido en la circunvalación como una medida para calmar el tráfico y en otro, que sería "agresiva"; o que no se recomienden los aparcamientos subterráneos en el interior del casco histórico pero se prevea uno en la plaza de la Reina. O que el informe medioambiental sea "demoledor" con respecto a los palafitos y éstos se mantengan en el planeamiento. "Por un lado está el deseo del equipo redactor y por otro la decisión política del equipo de gobierno que la contradice", interpreta Sebastián Terrada.